La tripulación de la misión Artemis II sale del Edificio de Operaciones y Control Neil A. Armstrong para dirigirse al Edificio de Ensamblaje de Vehículos y embarcar en su nave espacial Orión a bordo del cohete SLS
Ciencia
La NASA realiza el simulacro de la misión que devolverá al ser humano a la Luna
El vuelo Artemis II será el primer viaje tripulado del programa, una misión de prueba que orbitará la Luna a inicios de 2026
Los cuatro astronautas asignados a la misión Artemis II de la NASA participaron el 20 de diciembre de 2025 en un ensayo completo del día del lanzamiento en el Centro Espacial Kennedy, en Florida. El equipo, compuesto por Jeremy Hansen, de la Agencia Espacial Canadiense (CSA), y los astronautas estadounidenses Victor Glover, Reid Wiseman y Christina Koch, salió desde el Edificio de Operaciones y Control Neil A. Armstrong como parte del ejercicio de preparación para esta histórica misión.
Durante este simulacro, denominado prueba de demostración de cuenta regresiva, se recrearon todos los pasos del día del despegue. La tripulación se colocó los trajes espaciales, se desplazó hacia la nave Orión, y efectuó maniobras de entrada y salida del módulo espacial. Sin embargo, como el cohete SLS (Sistema de Lanzamiento Espacial) aún no se encuentra en la plataforma de despegue, la simulación se llevó a cabo dentro del Edificio de Ensamblaje de Vehículos, donde técnicos e ingenieros prosiguen con los trabajos finales de integración del cohete, la nave y los sistemas de apoyo en tierra.
Esta fase de pruebas es clave en la preparación del programa Artemis, una iniciativa con la que la NASA busca devolver a los astronautas a la Luna y establecer las bases de futuras expediciones tripuladas a Marte. La agencia espacial estadounidense plantea con esta misión no solo avanzar en la exploración lunar, sino también abrir nuevas vías para la investigación científica y el desarrollo económico asociado al espacio.
El vuelo Artemis II será el primer viaje tripulado del programa, una misión de prueba que orbitará la Luna a inicios de 2026 como antesala del alunizaje previsto en Artemis III. A través de este proyecto, la NASA reafirma su compromiso con la exploración del espacio profundo, con el objetivo de convertir a la Luna en un entorno operativo permanente y, a largo plazo, facilitar los primeros viajes humanos al planeta rojo.