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24 de abril de 2024

Marc Márquez, durante la entrevista con Risto

Marc Márquez, durante la entrevista con RistoCuatro

Viajando con Chester

Marc Márquez aclara su estatura de una vez por todas

El piloto catalán se queja de su moto: «El caballo ahora va cojo»

«Antes de operarme el brazo, la última operación, la retirada era una opción grande, con 29 años. Pero ahora bien, vuelvo a ser feliz. No hay dolor. Cuando hay dolor, te cambia el carácter», empezó diciendo Marc Márquez. Aquella fue la undécima operación de su carrera.
Lo ha pasado mal en los últimos tiempos. «Vienes de arrasar, de estar en la gloria, y ves el infierno... Es duro. Venía de una carrera deportivo que parecía un súper héroe. Y, de golpe, de un día para otro, lesiones, no salen las cosas…». Mentalmente, aún no ha dejado atrás del todo esos malos momentos: «Lo superaré cuando esté luchando por victorias cada fin de semana». Por ahora lo ve complicado, porque es un deporte donde importan el jinete y el caballo, y «el caballo ahora va cojo». Como la Honda no anda tan bien como quisiera, tiene que arriesgar más. «Más riesgo, más caídas», asume. «Tengo una moto que puedes ganar carreras puntuales, pero no un Mundial», concluyó.

Su abuelo le pide que se retire

Su abuelo le mandó un mensaje a través de una tableta. Le pidió que se retirase. «Tiene razón. Ya he ganado mucho. ¿Pero qué haces?», se preguntó en alto, para concluir que su pasión es las motos y si las deja se aburriría. «No me gusta estar relajado». No conoce los países a los que va con el Mundial de Motociclismo, sino solo los circuitos. Al año solo se permite siete días evasión total: «Tengo una semanita en verano de desmadre con mis amigos. Y algún finde libro por ahí…».
Risto Meijide y Marc Márquez, durante la entrevista

Risto Meijide y Marc Márquez, durante la entrevistaCuatro

Risto Meijide le fue soltando números durante la entrevista. El de Rossi, el que fue su ídolo. El de sus podios en el Mundial. Cuando dijo 168, se extrañó: «Ni idea». Aclaró el presentador que era su altura.
«169», corrigió el piloto, para después bromear, «cada día intento, pero no logro, llegar a 170». No tuvo complejo de bajito en el cole. «Si te sientes más bajito que los demás, te van a atacar», fue su receta contra un hipotético bullying. Para su profesión, hasta le ha venido bien: «En nuestro mundo es normal. Y es, muchas veces, una ventaja. Porque las motos son pequeñas».
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