Fotograma de `Extraña forma de vida´
Cine
Festival de Cannes: Almodóvar se enfrenta a su primer western en `Extraña forma de vida´
El cineasta manchego presenta la película protagonizada por Ethan Hawke y Pedro Pascal
El primer western de Pedro Almodóvar, Strange Way of Life (Extraña forma de vida), exhibido fuera de concurso en el 76º festival de Cannes, fue la ocasión para un verdadero homenaje al director manchego de parte de una sala repleta que ululaba su amor por él y por el protagonista de su filme, Ethan Hawke.
Prácticamente se sabía todo de este proyecto de corto que para Almodóvar significaba lo que permite el éxito, que es «el de poder elegir lo que se quiere hacer sin que nadie me lo impida»: que era la historia de dos viejos amantes que vuelven a reunirse después de 25 años, pero algunos con dobles intenciones.
Almodóvar declaró, poco después de la proyección, que quiso hacer un western clásico «pero a mi manera» sin reformarlo como hizo Sergio Leone. Sobre todo tratando de no ofender a los norteamericanos «que fueron los que crearon el género y que lo siguen considerando como propio».
En un pueblo perdido llega un hombre a caballo para encontrarse con el sheriff, su examante de 25 años atrás, pero debajo de ese encuentro existe una segunda intención: la de pedirle piedad para su hijo que ha asesinado a una mujer en un arranque de violencia.
Después de compartir un guisado cocinado por el sheriff, los dos pasan la noche juntos y, al día siguiente, el hombre revela sus intenciones. Al no conseguir respuesta positiva parte en busca de su hijo para que huya a México. El sheriff sigue sus huellas y trata de impedir la fuga, obligando al padre a herirlo y dejar que su hijo se escape.
«Elegí a Ethan Hawke porque es un actor que conozco por haberlo visto en cine y apreciado su versatilidad. Además descubrí que sabía montar a caballo, cosa que era muy importante para el filme» informó Almodóvar que dio una rueda de prensa con su actor en inglés, francés y español.
«Cada diez años se vuelve a hablar de que el western ha muerto pero siempre éste resucita, cambiando poco o mucho las reglas, pero solo recientemente el tema de la homosexualidad ha dejado de insinuarse para ser tratado de frente como en Brokeback Mountain (En terreno vedado) o The Power of the Dog (El poder del perro)».
«Pero nunca antes en el cine, ni en el western ni en otro género, se ha visto a dos hombres hacerse la cama juntos como en mi filme», asegura Pedro. «Mientras uno trata con este gesto de borrar lo ocurrido, el otro trata de recordarlo», al mismo tiempo que recalca: «Ahora se ve mucho western en televisión pero para mí, series o telefilms no son cine».
«Yo creo que la filosofía del filme está en las últimas palabras, cuando a la pregunta de que van a hacer dos hombres solos viviendo juntos, el otro responde ‘cuidarse, quererse, vigilarse’» asegura. Por su parte, Ethan Hawke recuerda haber recibido por mail la oferta de interpretar el filme «y me dije, debo haber hecho algo bueno en la vida para recibir una oferta como esta».
«Como muchos grandes cineastas con los que he trabajado, Pedro es un obsesivo del detalle y eso es bueno para un actor que sabe que el director está cuidando todos los aspectos y lo único que uno tiene que hacer es dar lo mejor de sí mismo», afirma Hawke.
Luego cada uno dio su versión de como seguiría el filme. Para Hawke, los dos vivirán juntos mientras para Pedro es algo más complicado. «Cuando el sheriff se recupera de la herida –dice– muele a golpes a su amante y parte para México en busca del hijo asesino, donde pasa toda una serie de aventuras. Lo sigue poco tiempo después el padre y se produce un tiroteo a tres, donde el padre prefiere matar al hijo y no a su compañero». Pero, «eso después de dos horas» declara riendo Almodóvar.
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