El deportista luso tiene una edad biológica de 28,9 años, casi 10 menos de los que en realidad tiene
Cristiano Ronaldo revela su rutina de descanso y de sueño a los 40 años: «Es la herramienta más importante»
«Cuando tienes 25 años no es lo mismo que cuando estás en tus 30, especialmente en el fútbol o en el deporte», reivindica
A sus 40 años de edad —los cumplió el 5 de febrero—, Cristiano Ronaldo continúa siendo una figura central en el panorama deportivo, especialmente tras lograr la clasificación con su selección nacional para la final de la Nations League. Sin embargo, más allá de los entrenamientos intensivos y de su espectacular genética, su verdadero secreto radica en la constancia, la disciplina diaria y, sobre todo, en saber escuchar a su cuerpo.
De hecho, así lo ha demostrado durante una entrevista en la que promocionó Whoop, una marca de pulseras inteligentes que monitoriza distintos parámetros fisiológicos para conocer el estado general de salud. Gracias a su forma física y su estilo de vida disciplinado, el dispositivo estimó que la edad biológica de Cristiano Ronaldo era de 28,9 años, es decir, casi una década menos que su edad cronológica actual.
Tras revelarse este dato, el portugués compartió algunos de los secretos que le permiten mantenerse joven tanto física como mentalmente. Uno de los aspectos que más destacó fue la importancia del descanso. Según explicó, duerme una media de 7 horas y 15 minutos cada noche, una cifra ligeramente superior a las mínimas recomendadas por los expertos para un adulto.
«Dormir es la herramienta más importante que tengo, es el único momento del día que puedes recuperarte y poner en su sitio todo. Para mí, una buena noche de sueño es lo más importante que podemos tener en la vida en cuanto a salud», admitía en la entrevista.
La importancia de la demanda física
En lo que respecta a sus hábitos de sueño, Cristiano Ronaldo subraya que la consistencia es fundamental. «Suelo irme a la cama entre las 23:00 o 00:00 horas y me levanto a las 8:30 o 8:45 horas», detallaba. También confesó que no le agradan los viajes ni los partidos nocturnos, ya que alteran su ritmo natural.
«Mi cuerpo tiembla y la calidad del sueño no es la misma», admitía. Aun así, reconoce que en esos casos es necesario buscar un equilibrio para no comprometer las horas de descanso, algo que considera clave para rendir al máximo nivel.
Debido a este motivo, cuando viaja durante la temporada o disputa partidos en horarios poco habituales, trata de ajustar su rutina para minimizar el impacto en su descanso. Tal como él mismo explica: «Cuando me acuesto una hora más tarde, me levanto también una hora tarde. Lo más importante es la consistencia». De este modo, prioriza mantener un ciclo de sueño regular, adaptando sus horarios para asegurar que su cuerpo reciba el descanso necesario sin romper la rutina que tanto valora.
Cristiano Ronaldo con el Al Nassr
Más de 20 años de carrera
Con el paso del tiempo, ha aprendido a ajustarse «año a año a la demanda» de su cuerpo. «Cuando tienes 25 años no es lo mismo que cuando estás en tus 30, especialmente en el fútbol o en el deporte. Me sigo sintiendo bien y priorizo mi recuperación y mis horas de sueño», ha reivindicado.
Por otro lado, también ha sabido encontrar en las técnicas de recuperación un aliado fundamental para mantener su rendimiento diario. Métodos como la terapia de compresión o la crioterapia forman parte habitual de su rutina, ya que ayudan a aliviar el estrés muscular acumulado tras los entrenamientos y los partidos exigentes.
Como él mismo resume: «Si tú entrenas dos horas, tienes que recuperarte durante dos horas. Si son tres, tienes que recomponerte durante tres horas». Esta filosofía refleja su enfoque meticuloso y disciplinado hacia el cuidado del cuerpo, clave de su longevidad deportiva.