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Xabi Alonso, en una sesión de entrenamiento con el Real Madrid

Xabi Alonso, en una sesión de entrenamiento con el Real MadridGTRES

Xabi Alonso ataca el gran reto, el que Ancelotti y Zidane no tuvieron: triunfar sin Modric ni Kroos

  • El Real Madrid obtuvo sus seis últimas Champions con el croata y cinco con el alemán; buscar sustitutos es el objetivo del técnico, con Güler como alumno aventajado

  • El Real Madrid tiene la plantilla más valiosa del mundo, 1.400 millones, y ha invertido 176 con su política de jóvenes de futuro

Xabi Alonso sabe el sitio al que llegaba y sabe lo que se espera de un entrenador cuando firma por el Real Madrid. Solo el hecho de fichar por la casa blanca te exige un rendimiento ilimitado sin mirar el potencial de la plantilla. Da igual, el entrenador que viene al Real Madrid sabe que se le va a exigir todo. El guipuzcoano ha aterrizado en el club después de una mala temporada y tiene el objetivo de dirigir el retorno a los grandes éxitos. Los envidiosos antimadridistas dicen que ya podrá con esa plantilla. No valoran externamente que a este técnico solo le vale ganar por todo lo alto, como hicieron Ancelotti y Zidane. Aquí, en el cuartel general de Valdebebas, no consuelan los triunfos particulares antes rivales sanguíneos, como ocurre con la mayoría de los antimadridistas.

Aquí solo valen la Champions, sobre todo, la Liga en un segundo plano y el Mundial de Clubes cuando toca. Los demás trofeos, Supercopa de España y Copa del Rey, son premios de consolación que se celebran si se vence a los adversarios eternos, pero que consuelan poco en el balance general del año fiscal. Xabi ataca el objetivo con un órdago a lo grande: alcanzar el éxito sin dos hombres que fueron imprescindibles para Ancelotti y para Zidane. Se llaman Modric y Kroos. Y ya no están.

Es una afrenta especial que pocos han analizado. Modric fue fundamental en la conquista de las últimas seis Copas de Europa, seis Champions que han hecho que esta década prodigiosa de Florentino Pérez, desde Lisboa a Londres, pasando por Milán, Cardiff, Kiev y París, sea la más importante de la historia del club deportivo más afamado del mundo. Kroos no estuvo en Lisboa porque fichó por Real Madrid un mes después. Y el alemán fue también imprescindible en la conquista de las otras cinco Ligas de Campeones.

Hoy, Alonso, que obtuvo la Champions de Lisboa como futbolista, desea emular ese éxito como entrenador en la misma empresa futbolística, la más conocida del planeta. Y el dilema es que no tiene en el plantel a un Xabi, un Toni o un Luka para dirigir su proyecto en el campo. El tolosarra se mide a un listón que no tuvieron que superar Zinedine y Carlo. No es baladí.

La plantilla más valiosa del mundo

La plantilla del Real Madrid está considerada la más valiosa del mundo, con un precio total de 1.400 millones que está calculado muy a la baja. Por ejemplo, el caché de Gonzalo se encuentra tasado en una cifra ridícula, ocho millones. Su cláusula de 50 millones ya la querían pagar varios secuaces de la Premier. El Real Madrid le va a renovar por seis años y le va a colocar una rescisión de mil millones.

El valor real del elenco madridista se acerca a los 1.600 millones. Y, sin embargo, Xabi tiene como primera medida formar a un director de orquesta, porque en dos años se han ido del Real Madrid los dos mejores del mundo. Hay tres hombres en esa tesitura. Güler, Ceballos y Mastantuono son sus pupilos más adecuados para realizar esa labor en el césped, ayudados por Valverde y por Bellingham cuando pueda reaparecer en octubre. El responsable de la plantilla quiere que el inglés retrase su posición para apoyar al nuevo timonel.

La carta de Mastantuono es de futuro. Posee la clase para dirigir un equipo. Puede hacerlo acompañado de un veterano a su lado. Como en el caso de Güler, es cuestión de retrasar su posición y convencerle de la nueva misión. Ahora, el primer elegido para esa dirección es el turco. El argentino tendrá otros cometidos en la banda derecha y como mediapunta. Puede esperar para que también le llegue ese reto de la batuta. Solo tiene 17 años.

Güler toma el testigo

Arda Güler es el primer candidato. El primer elegido para superar el examen. Ha recibido toda la confianza del preparador para asumir ese rol y lo está haciendo con una mentalidad ambiciosa y positiva. Tiene veinte años y una personalidad de mayor edad, madura. Su nuevo jefe le dijo que iba a ser el dueño de la batuta y asumir esa responsabilidad al lado de veteranos consagrados le hace crecer como persona y como profesional muy rápidamente.

Su mentalidad ha evolucionado tan velozmente como su cuerpo. Los preparadores físicos han trabajado duro con él para que adquiera muchos kilos de músculo. Vino al Real Madrid nada más cumplir la mayoría de edad y tenía su musculatura por formar. En Valdebebas lo han moldeado y lo están trabajando para que sea más fuerte y más resistente, para que aguante mejor los choques. Que tenga cuerpo de mediocampista. En ese camino avanza.

Una inversión en fichajes de 176 millones

El valor del plantel madridista ha crecido exponencialmente porque Florentino Pérez ha realizado cuatro fichajes importantes y ha ascendido a Gonzalo desde el filial después de una actuación colosal en el Mundial de Clubes que ha multiplicado su cotización deportiva y económica. Trent costó cinco millones. Huijsen supuso 58 millones. Carreras valió 50 y Mastantuono asciende a 63,5 millones por la imposición de una cantidad escandalosa de impuestos, pues el precio real del argentino es de 45. La inversión total ejecutada por la dirección deportiva es de 176,5 millones. Y la renovación puramente futbolística de la plantilla no tiene precio.

Esa es la clave de toda esta actuación, el rejuvenecimiento del equipo con los jóvenes talentos del mercado. Esa la filosofía que Florentino Pérez aplica desde que regresó a la presidencia hace dieciséis años. No quiere pagar fuertes cantidades por figuras ya reconocidas mundialmente y lo que hace es contratar a las jóvenes promesas en ciernes que inyectan savia nueva, energía y una ambición por ganar títulos insuperable.

Florentino Pérez moderniza paulatinamente la plantilla, año a año, y cuando la entidad no gana los grandes títulos, porque no siempre se puede ganar, lleva a cabo la mayor inversión. Es lo que ha sucedido este verano.

Huijsen, Carreras y Mastantuono son futbolistas para una década si confirman su rendimiento y su evolución a partir de ahora. Huijsen ya lo ha demostrado. Carreras y Mastantuono no han debutado. Junto a ellos se ha incorporado Trent Alexander-Arnold, un hombre de banda derecha que se encuentra en el ecuador de su carrera, que ha sido un baluarte en el Liverpool y que viene a rubricar una trayectoria de éxitos en el Real Madrid.

El quinto jinete es un canterano, Gonzalo, un ariete que ha cubierto una carencia evidente del equipo, la necesidad de un delantero centro rematador. El madrileño es un artillero muy eficaz y así se lo ha demostrado a Xabi Alonso. Y sobre todo es un estilete moderno, de los que gustan al guipuzcoano, que juega sin balón, que atosiga a los centrales, que los desgasta, que los ofusca y los marea hasta ganarse el hueco para marcar goles o dar pase el decisivo. El nueve estaba en casa y sale gratis. Eso encanta al club y a la afición.

Alonso ha visto cómo el Real Madrid ha potenciado la línea defensiva con Trent, Huijsen y Carreras, como él solicitaba. Ha visto cómo la dirección deportiva reforzaba el centro del campo con un media punta, Mastantuono, y apuntalaba la delantera con Gonzalo, quien sacó nota en el examen de selección interna que el preparador realizó a petición de la casa. Fue un acierto mirar dentro y encontrar oro. Pero el entrenador ataca el reto que nadie tuvo enfrente: triunfar sin Modric ni Kroos. Si triunfa escribirá nuevas páginas de platino en el Bernabéu.

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