Fundado en 1910
José María Rotellar

Sánchez empobrece la economía

El empobrecimiento de la población, cuya economía pende de un hilo, no va a poder afrontar sus compromisos de pago gracias al legado de Sánchez

Act. 25 jun. 2025 - 10:06

Vivimos un tiempo de intenso empobrecimiento de las familias. Es cierto que la economía resiste en el corto plazo, pero apoyada en el subsidio y en la eventualidad. Nunca se han firmado más contratos indefinidos que han concluido a los pocos días; nunca ha habido más contratos a tiempo parcial; nunca el nivel del gasto ha sido más alto.

Hemos vivido muchos meses de elevada inflación medida por el índice de precios, con un incremento de los mismos todavía superior en muchos alimentos y productos básicos, que ha ido estrangulando a las familias en los últimos tiempos, pues la inflación es un cáncer que se enrosca en la economía productiva y la carcome.

Por ello, cuánto mejor habría ido si los bancos centrales no hubiesen tardado tanto en reaccionar, generando con su amplio retardo interno lo que ha sido un larguísimo retardo externo de su política monetaria. Y cuánto mejor nos iría si los gobiernos dejasen de presionar al alza los precios, alimentando los cuellos de botella de manera artificial, que es lo que hacen con su política fiscal tremendamente expansiva por el lado del gasto público, que dificulta y retrasa la aplicación de la política monetaria.

La inflación ha ido estrangulando a las familias en los últimos tiempos, pues es un cáncer que se enrosca en la economía productiva y la carcome

Es el empobrecimiento de la población, cuya economía pende de un hilo que, si se rompe, en forma de pérdida del puesto de trabajo, no va a poder afrontar sus compromisos de pago, pues los ahorros los ha gastado ya para combatir la inflación, sin generar nueva capacidad excedentaria de recursos.

Desde que gobierna Sánchez, la inflación ha subido un 21,56 % y la subyacente un 19,44 %.

La economía española no deja de perder productividad y competitividad, y el cambio de modelo económico no está girando hacia una economía más productiva, especializada en productos y servicios de alto valor añadido, sino que marcha en sentido contrario, hacia una economía de bajo valor añadido, con crecientes subsidios y pérdida de capacitación profesional.

Eso hace que la economía no se sostenga por sí misma, que viva anestesiada, y que se estén produciendo flujos migratorios en el campo laboral en ambos sentidos, tanto de entrada como de salida.

Eso provoca que el crecimiento español, además de ser cortoplacista, se impulsa, en gran parte por crecimiento de población, pero con pérdida de prosperidad, como muestra la evolución de PIB per cápita en paridad del poder de compra, donde España ha dejado de converger y ha retrocedido respecto de la media de la UE, quedando en el 90% de la media de la UE, y si no estamos por debajo se debe a la revisión extraordinaria del PIB, que lo ha elevado dos puntos para el mismo año, volviendo a ser potencial receptor de fondos de cohesión a los que optan los países más pobres de la UE. Así:

El incremento del PIB se da en gran medida por el aumento de la inflación, que hace crecer el PIB nominal casi 21 puntos más que el PIB real o constante entre 2018 y 2024.

Eso hace que el PIB per cápita nominal crezca, pero crece menos que el PIB nominal, lo cual pone de manifiesto que hay empobrecimiento de la economía, porque está creciendo el PIB por la inflación y por acumulación de población, pero crece más la población que el PIB, hecho por el que el PIB nominal pc crece menos que el PIB nominal.

Además, perdemos posiciones en la UE respecto a la media del PIB pc nominal español sobre la media de la UE, retrocediendo 2,8 puntos entre 2018 y 2024.

Aunque en paridad del poder de compra mejora cuatro décimas, es prácticamente plano y sólo se debe a las revisiones extraordinarias realizadas.

Datos PIB

Datos PIBINE y Eurostat

Adicionalmente, ahora que hay que presentar la declaración del IRPF, conviene volver a recordar que los ciudadanos tienen que soportar una carga de impuestos todavía mayor, que hace que su renta disponible merme también por esta vía: más IRPF, más cotizaciones a la Seguridad Social, hacen que el infierno fiscal contribuya de manera clara y potente al empobrecimiento familiar. Es una situación que puede comenzar a ser insostenible y que sólo empeorará a medida que el Gobierno aumente gasto e impuestos.

Así, la renta disponible media por persona en los hogares pasa de 15.618 euros en 2018 a 16.480 euros en 2023, un crecimiento del 5,52 %. En el mismo período, el IPC crece un 17,80 %. Como la renta bruta per cápita de los hogares crece un 18,85 % en dicho período, se infiere una pérdida fuerte de poder adquisitivo por miembro del hogar, debido a crecimiento de población, que no a actividad económica, y a subida de impuestos. Así, mientras el IPC crece un 17,80 % entre 2018 y 2023 y la renta bruta per cápita de los hogares crece un 18,85 %, la renta disponible per cápita de los hogares lo hace sólo un 5,52 % (no hay datos a 2024). Todo ello, muestra la pérdida de poder adquisitivo de las familias.

Somos más pobres. Ése será el triste legado económico de Sánchez: las revisiones hacia arriba del PIB no pagan facturas; la economía real de los ciudadanos ve cómo cada vez puede afrontar sus gastos con menor amplitud, porque su poder de compra ha caído, porque se han empobrecido.

José María Rotellar es profesor de Economía y director del Observatorio Económico de la Universidad Francisco de Vitoria.

comentarios
tracking

Compartir

Herramientas