El problema no es Trump, sino China: compra 10.000 millones menos a la UE que a Suiza

Imagínese usted en una gala de entrega de premios, con una sala abarrotada de presidentes de los principales países del mundo, acto organizado por la Unión Europea y presidido por Ursula von der Leyen, vestida de traje largo, espalda al aire y con un ligero escote, diseñado no por una casa francesa de las de lujo y moda, pero tampoco por un modista italiano, ni por supuesto por un diseñador español. El traje no se sabrá quién lo ha diseñado hasta el final de la entrega del premio, porque será del país ganador.

Los premios obviamente serán entregados por la presidenta de la Comisión Europea, que para eso es la jefa y manda mucho. En total se entregarán tres premios sin derecho a accésits.

El primer premio entregado será para el país que más haya reducido el volumen de compras a la Unión Europea, con el objetivo de decirle que para el año que viene no sea tan malo y nos compre un poco más, que no puede ser que a ella como presidenta le toque el amargo trago de entregarle ese premio.

Y después de darle mucho cariño para que sea más bueno en los próximos meses, anuncia en su magnífico inglés con acento teutón… «And the winner is… CHINA»

Y aquí empieza la explicación de porque se le da a China:

El jurado ha considerado que no se lo podía dar a Estados Unidos, porque Trump es un poquito bruto y nos tiene amenazados desde que llegó al poder.

No importa que sea el país al que más exportamos en los cinco primeros meses del año. No importa que la cifra sea espectacular y que le hayamos vendido 265.186 millones, el 15,4 % de todas nuestras exportaciones, y nos haya comprado 47.716 millones más. Pero como nos ha puesto unos aranceles del 15 %, es un malo, malote y no se merece el premio.

Pero China, que no dice nada y siempre calla y así como el que no quiere la cosa, solo nos ha comprado 82.102 millones de euros, que supone el 4,8 % de lo que vendemos y encima nos reduce las compras en 9.439 millones, por ser bueno y así poder pedirle, por favor, que nos compre algo más le damos el premio a China que recoge su presidente Xi Jinping.

Trump se coge un globo, de los habituales en él, se levanta y se larga amenazando de que nos vamos a enterar, porque la UE sólo ha crecido en ventas 20.295 millones de euros, pero con él hemos crecido en 47.716 millones de euros y nos dice chillando que si seguimos así nos comprará más todavía.

Después de esta entrega se procede a anunciar el segundo premio, que se concede al país que mejor nos ha tratado y que con más cariño nos ha vendido sus productos:

Y cómo no, igual que en nuestras ventas debería haber sido Estados Unidos el ganador, en el capítulo de a quien le compramos más el premio tiene un claro ganador: CHINA.

A los chinos les hemos comprado 226.251 millones de euros, que representan el 13,5 % del total de nuestras importaciones y además para que los chinos y el mundo lo sepan, les hemos comprado 25.405 millones de euros más, cuando el incremento total de compra de la UE ha sido inferior y se han quedado en 24.243 millones de euros.

Recoge de nuevo el premio Xi Jinping, que orgulloso y dando cabezazos vuelve a su sitio, callado, pero riéndose por dentro. Ya lleva dos de tres.

Y en último lugar, el jurado ha tenido una enorme discusión para decidir a quién se le daba. En la pantalla aparecen los siguientes datos:

La Unión Europea, en los cinco primeros meses del año, ha reducido su superávit en 3.948 millones, siendo Estados Unidos, el país con el que más superávit hemos tenido, con 43.206 millones de euros. Por su parte, China nos ha generado un mayor déficit en nuestra balanza comercial de productos con un total de 34.844 millones de déficit. Vamos que sin China hubiésemos tenido una mejora espectacular.

Y Ursula anuncia que el premio no se lo dan a Estados Unidos porque estaban convencidos de la pataleta de Trump. Y si no estaba y no recogía el premio les iba a hacer un feo a la UE y eso no podía ser.

Así que después de discutir mucho y, por supuesto, con el muy pequeño margen de un voto en el último minuto y gracias a Pedro Sánchez que cambió de opinión, como siempre, el premio ha sido para: CHINA.

Úrsula imitando a «Pe» salta y grita de alegría mientras de nuevo el presidente chino se levanta a recoger el premio.

Hasta aquí una historia inventada con muy mala leche, pero que nos cuenta en donde estamos en realidad. La Unión Europea le vende cada vez más a Estados Unidos y menos a China.

La UE le compra algo más a Estados Unidos, pero mucho menos de lo que le vende, pero a los chinos le compramos 2,8 veces más que lo que le vendemos.

Con Estados Unidos tenemos un superávit de 43.206 M€ en 5 meses y con China un déficit de 34.844 M€. Pero por culpa de las formas de un payaso que tiene razón en lo que pide, a Estados Unidos le echamos la culpa de todos nuestros problemas y parece que, en la UE, al igual que Sánchez, nos estamos echando en manos de los chinos. Unos como Pedro sin parar de firmar acuerdos y otros callando y dejando hacer.

¿Han escuchado alguna voz de los políticos de la UE criticando a Trump? A patadas. ¿Han escuchado alguna voz de los políticos de la UE criticando a Xi Jinping? Ninguna.

Pues eso. Y el traje de Úrsula, posiblemente hubiese sido de una diseñadora de «moda lenta y circular» como Natascha von Hirschhausen de la que fue embajadora de su concepto de modelo de negocio.