¿Qué reformas se pueden hacer en un piso de alquiler sin obras?

En la capital madrileña existen más de 10.000 pisos disponibles para alquilar. Una de las tendencias más frecuentes en 2025 es precisamente el alquiler de viviendas. Hablamos de una demanda sin precedentes: nunca antes habían estado tan cotizadas como ahora.

Familias, adultos solteros, estudiantes y jóvenes apuestan por el alquiler debido a su menor carga financiera, la flexibilidad y las numerosas complicaciones que conlleva la compra de una vivienda, como el acceso a una hipoteca.

Este auge en la demanda ha provocado una inflación expansiva. La escasez de oferta ha elevado la rapidez con la que hay que actuar para alquilar, pero los precios no ayudan.

Una vez superada la odisea de encontrar una vivienda y el inquilino se establece, comienza la supervisión de las normativas reguladoras.

Es necesario comprobar las condiciones del contrato pactado entre ambas partes, ya que existen varias acciones que no pueden realizarse sin autorización del propietario.

Una de las primeras ideas que suele tener un inquilino al llegar a su nueva casa es la de decorarla a su gusto. Sin embargo, la redecoración completa no está permitida en un inmueble alquilado.

Lo primero, por tanto, es revisar qué indica el contrato respecto a las reformas, para saber qué puede hacerse y qué no.

En la mayoría de los casos, las obras no están permitidas sin el consentimiento expreso del propietario. Las intervenciones de mayor calado, como los derribos o modificaciones estructurales, requieren autorización.

Aun así, existen alternativas decorativas que no alteran la estructura original de la vivienda y, por tanto, sí pueden llevarse a cabo. A continuación, algunas opciones para personalizar tu hogar sin necesidad de hacer obras:

Colocación de papel decorativo en paredes de salas o habitaciones.Elementos móviles como estanterías, biombos, cuadros, plantas, etc.Cambio de cortinas en las distintas estancias.Transformar el suelo mediante alfombras.Uso de mantas, juegos de cama y fundas para cojines, que modifiquen la colorimetría de las habitaciones.Instalación de lámparas o luces LED que no requieran modificaciones eléctricas.

Estas soluciones permiten adaptar el piso al gusto del inquilino sin incumplir el contrato ni alterar la integridad del inmueble.