El decreto de Zapatero que disparó la masificación en las aulas y que ahora Sánchez va a cambiar por presión

El pasado 16 de octubre el grupo de trabajo del Estatuto Docente, en el que se encuentran representados los sindicatos y el Ministerio de Educación que lidera Pilar Alegría, aprobó el primer borrador del anteproyecto de ley de mejora de las condiciones para el desempeño de la docencia y la enseñanza en el ámbito de la educación no universitaria, y se adoptan otras medidas para la mejora del sistema educativo.

Este primer borrador se produce después de que las organizaciones sindicales en materia educativa hayan presionado al Gobierno para reducir las ratios de los colegios, reclamando así menos alumnos por clase para poder mejorar las condiciones laborales de los docentes, quienes denuncian verse en ocasiones superados por la cantidad de estudiantes que tienen a su cargo.

Ante las amenazas de los sindicatos, que estaban dispuestos a convocar huelgas indefinidas del profesorado, Sánchez se ha visto obligado a ceder y modificar después de 15 años un decreto que promulgó el también socialista y expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero.

Según reza el texto publicado en el Boletín Oficial del Estado el 12 de febrero de 2010, los centros docentes que ofrecen el segundo ciclo de la educación infantil tendrán, como máximo, 25 alumnos por unidad escolar, número que se establece también para los colegios de Educación Primaria. Por su parte, los centros de Educación Secundaria pueden tener, como máximo, 30 alumnos por unidad escolar en la ESO y 35 en Bachillerato.

Este decreto fue promulgado después de la aprobación de la Ley Orgánica de Educación (LOE) del 2006, también bajo el mandato de Zapatero, en la cual no se especificaba ninguna variación de las ratios. Esta ley fue sustituida en el año 2013 por la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) del Gobierno de Rajoy, quien tampoco valoró una reducción de alumnos por clase.

La última ley educativa, y por la que nos regimos desde el año 2020, es la Ley Orgánica de Modificación de la LOE, aprobada por el Gobierno de coalición que lidera Pedro Sánchez. En esta norma también se perdió la oportunidad de modificar la cantidad máxima de alumnos por aula.

El anteproyecto de ley

En este contexto, y ante la presión de los sindicatos, el Ministerio de Educación ha propuesto ahora reducir los alumnos por clase a un máximo de 22 estudiantes en Primaria y a 25 en la ESO.

En la primera reunión con los sindicatos ANPE, CCOO, UGT, CSIF, STES y CIG celebrada a finales de septiembre, el Ministerio presentó un anteproyecto de ley con el que planteaba reducir por ley la ratio en aulas con alumnado con necesidades especiales y en centros docentes situados en zonas de complejidad social.

Dicho documento también preveía una «reducción progresiva general» de los números máximos de alumnado por aula y en aquellos cursos donde se transiciona de educación Primaria a ESO. El Ministerio concretó más esta propuesta en la segunda reunión.

Las ratios alumnado/profesorado establecidas en el anteproyecto de ley serán de aplicación desde el curso escolar 2027/2028 para su aplicación progresiva en el primer curso del segundo ciclo de etapa de Educación Infantil y el primer curso de la etapa de Educación Primaria.

Desde el curso escolar 2028/2029 para su aplicación progresiva en el primer curso de la etapa de Educación Secundaria Obligatoria; desde el curso escolar 2029/2030 para su aplicación progresiva en el primer curso de Bachillerato.