
Los miembros de la cúpula de Junts, en una imagen de archivo
A la tercera
La Mesa del Congreso admite la cuestión de confianza de Junts a la que Sánchez no se someterá
El debate está por fijar, o el 25 de febrero o el 11 de marzo. Aunque sea aprobada, el presidente hará caso omiso
Tal y como estaba previsto, la Mesa del Congreso ha admitido a trámite este martes, a la tercera, la proposición no de ley de Junts que insta a Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza. Después de que, la semana pasada, el presidente y Carles Puigdemont pactaran que el PSOE la calificaría a cambio de descafeinar su redacción.
Aún no está decidido si se debatirá el martes 25 de febrero o el martes 11 de marzo, pero lo que sí está claro es que el resultado de la votación será estéril: el presidente no va a activar ese mecanismo parlamentario que la Constitución le reserva solo a él.
Como ya informó El Debate, la proposición no de ley reza: «El Congreso de los Diputados insta al presidente del Gobierno español a considerar la oportunidad de plantear una cuestión de confianza, conforme a la prerrogativa que le confiere la Constitución, atendiendo al carácter político, sin vinculación jurídica». Es decir, reconoce que es una potestad de Sánchez y, además, que no va a ningún lado.
El PP no se opondrá a su aprobación, aunque sea un brindis al sol. «No tenemos nada en contra de que el presidente del Gobierno someta su estabilidad política a la consideración de la Cámara», señalan fuentes populares a este periódico. Vox prefiere no adelantar su postura. En cualquier caso, y aunque sea aprobada, el presidente no se dará por aludido, y eso es parte de su acuerdo con Puigdemont. De hecho, el propio Sánchez adelantó el pasado martes en una comparecencia en la Moncloa que el Gobierno no considera «necesario» someterse a una cuestión de confianza.
Aun así, la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, defendió el domingo en una entrevista en el diario digital catalán Vilaweb: «Merece la pena que el debate se haga y que se vote».