La ministra portavoz, Pilar Alegría, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su llegada al hemiciclo
El Gobierno cesa este martes a la mano derecha de Salazar en un intento de acotar el enorme daño del escándalo
El PP le citará en la comisión del Senado: «Tendrá que contar por qué Sánchez le protegió»
«¿Cuántos casos más de acoso, corrupción y robo oculta el PSOE?», se pregunta Vox
Reconocía ayer Pilar Alegría que «no se ha avanzado con la celeridad que era más que necesaria» tras recibir a través de los canales internos del PSOE las denuncias contra Francisco Salazar por presunto acoso sexual que habían presentado varias mujeres del partido, y que al parecer desaparecieron del sistema por un error -alegan los socialistas- hasta que se han reactivado ahora, cuando han salido a la luz varios testimonios. Aseguró que la investigación «sigue en marcha» y que llegará «hasta sus últimas consecuencias». «Máxima repulsa ante cualquier conducta machista», zanjó la portavoz del Gobierno.
En plena crisis, cada vez más profunda en el seno del PSOE, el Gobierno, en un intento de poner coto al escándalo, decidió este domingo cesar como director del departamento de Coordinación Política en el Gabinete de la Presidencia del Gobierno a Antonio Hernández, mano derecha de Salazar en Moncloa. Una decisión que fue acordada entre el Ejecutivo y el propio Hernández, según trasladaron fuentes del Ejecutivo a Europa Press. Defendió Alegría que han actuado «con absoluta diligencia» con este cese, que se hará oficial en el Consejo de Ministros de este martes. Según se ha publicado en las últimas horas, Hernández habría sido señalado por mujeres denunciantes de Salazar como presunto «encubridor» de sus comportamientos.
Buscan calmar el ambiente, haciendo ver que toman medidas con rapidez y que el caso ya está controlado -pese a que han pasado cinco meses desde que se conocieron esas primeras denuncias-, dado que crecen las voces que dentro del PSOE exigen explicaciones detalladas sobre qué ha pasado, y también las que piden que se lleve a la Fiscalía, algo que el propio Sánchez descartó que fuera a hacer su partido indicando que no puede, pero que sí se ofrece a ayudar a las víctimas si dan ese paso.
Tanto desde el PP como desde Vox han denunciado el silencio de los socialistas y señalan a Pedro Sánchez. Los populares van a citar en el Senado a Salazar para que comparezca en la comisión que investiga el caso PSOE y sus ramificaciones. Cree la formación de Alberto Núñez Feijóo que ese «encubrimiento» por parte de Sánchez de quien fuera un hombre de su confianza -«el quinto del Peugeot», en palabras de Alicia García, la portavoz del PP en el Senado- responde a que Salazar «sabe demasiado», de las primarias de 2017, de «los chanchullos» y de ese equipo formado por Koldo García, José Luis Ábalos y Santos Cerdán que acompañó a Sánchez.
«Esto no es un error administrativo. ¿Qué ha hecho Sánchez? Callar, proteger y mirar hacia otro lado. (...) Quiere silenciar el escándalo con ceses de segunda o de tercera, pero que llegan muy tarde y se quedan muy cortos», reprochó García. «Si Sánchez piensa que puede hacer como si nada con el escándalo de Salazar, lo lleva claro. (...) Paco Salazar tendrá que comparecer en el Senado y contar por qué Sánchez le protegió», recalcó este lunes Ester Muñoz, la portavoz en el Congreso.
Desde las filas de Vox, denuncian que el PSOE ha cesado a la mano derecha de Salazar no por lo que hizo, «lo sabían desde junio», sino «porque ha salido a la luz», manifestó su portavoz parlamentaria, Pepa Millán. «¿Cuántos casos más de acoso, corrupción y robo oculta el PSOE? El mayor peligro para los españoles y para las mujeres especialmente, son ellos. Los enemigos de España de siempre, todos cortados por el mismo patrón», criticó. Abascal pidió este fin de semana la dimisión de María Jesús Montero tras conocerse que se vio con una de las denunciantes de otro socialista también por presunto acoso, Antonio Navarro, exlíder del partido en Torremolinos.