De este agua no beberéRafael González

La rumana sin carné y los pobres sin hogar

El socialista pues, se muestra como partido antiestigmatizante pero según y cómo

Actualizada 05:05

La socialista Alicia Moya, concejal del partido de Pedro Sánchez en el Ayuntamiento de Córdoba, ha manifestado la oposición de su grupo al proyecto de reutilización del Colegio Lucano como centro para personas sin hogar, edificio cerrado ante la falta de niños en un barrio envejecido. La izquierda señala el envejecimiento del barrio de la Fuensanta como si nunca hubiera tenido responsabilidades de Gobierno en la capital y oportunidades para paliarlo. Es más, los barrios envejecen a pesar de las dinámicas y siempre reivindicativas asociaciones vecinales, que son protestantes con el PP aunque el PP les invite a peroles de confraternización y el alcalde se ponga vaqueros. En el tema del colegio Lucano acusan al equipo de gobierno de mentir ya que éste anunció que el asunto estaba hablado con el vecinismo – ese consenso dialogado tan consensual- y dicen los vecinos que no, que ellos se han encontrado el pastel en la prensa, lo mismo que los socialistas, que reiteran que como oposición no se les informa de las cosas de democráticas maneras. O sea, que el Ayuntamiento puede ser un diálogo de sordos según se desprende de todo esto.
Como todavía a ningún iluminado se le ha ocurrido proponer una residencia canina en el antiguo centro escolar – aunque todo se andará- lo que en principio parece claro, y loable, es que el uso que se le pretende dar va dirigido a las personas sin hogar, objetivo al que se opone el PSOE. El sanchismo prefiere un centro de mayores porque los viejos dan más votos, a diferencia de los sin techo que además de no tener techo tampoco suelen tener urna. Oficialmente, según la edil Moya, es que no desean que el barrio sufra «una estigmatización» ya que – y eso no lo ha dicho- en ese barrio también está el hogar de Cáritas para la gente sin casa. Demasiados pobres juntos incluso para las progresistas asociaciones de vecinos. El socialista pues, se muestra como partido antiestigmatizante pero según y cómo, porque ya sabemos la tremenda labor formativo-mediática y legislativa que están empleando en estigmatizar a la extremaderecha, o sea, al PP y sus votantes también. Hay media España de la oscuridad y alberga horrores, nos repiten.
En el fondo del estigma, esto es Vox, la concejal Badanelli ha levantado la mano para decir que ellos tienen una mujer y rumana y contratada que no puede trabajar en el Ayuntamiento- consistorio de consenso- porque no tiene DNI. El estigma machista y xenófobo de Vox se ha descubierto como tal – solo estigma adosado- mientras que el socialismo antiestigmantizante no ha mostrado sororidad hermana ni un manifiesto leído por alguna funcionaria del movimiento 8M a favor de la rumana-mujer-despapelada.
Y así tenemos una contratada sin carné que no puede fichar en Capitulares y a la gente sin hogar dando vueltas en la calle para no estigmatizar a un barrio.
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