Manifestación en Parla en favor del hiyab
Asamblea de Madrid
Vox redobla su ofensiva contra el hiyab: pide a Ayuso prohibirlo en todos los edificios y espacios públicos de Madrid
Vox no ceja en su empeño de desterrar el hiyab, una prenda que, para los de Santiago Abascal, supone una «cárcel de tela» para las mujeres y una muestra de la peligrosa «islamización» que esta sufriendo España y, en concreto, Madrid. Un asunto en el que el grupo parlamentario de Vox en la Asamblea de Madrid ha incidido especialmente en los últimos meses, con diversas iniciativas, después de que el tema saltara a la palestra por las manifestaciones en Parla en favor del hiyab. Unas protestas que se desencadenaron por la prohibición en tres centros del municipio de utilizar esta prenda en sus instalaciones.
Cabe recordar que, en la actualidad, la Comunidad de Madrid no legisla sobre esta cuestión y son los propios colegios los que, libremente, pueden decidir si permiten o no el uso del hiyab. Así las cosas, Vox ha pedido en numerosas ocasiones que el Ejecutivo autonómico prohíba su uso en los centros educativos pero, ahora, ha ido un paso más allá con una nueva Proposición No de Ley en la que pide a Ayuso prohibir el pañuelo islámico no sólo en escuelas, sino también en universidades, hospitales, instalaciones deportivas, parques infantiles y, en definitiva, en todos los edificios y espacios públicos que dependan del Ejecutivo regional.
Para los de Isabel Pérez Moñino, esta prenda es «contraria a los derechos fundamentales de las mujeres» y también atenta contra la identidad española. Además, en su iniciativa, Vox reclama al Gobierno madrileño que se garantice «la igualdad entre hombres y mujeres, la integración cultural y el respeto por las tradiciones, cultura, idiosincrasia y valores propios de España», así como la adaptación de todas las personas a los modos de vida «propiamente nacionales».
«Una de las principales víctimas de la islamización que crece a pasos agigantados en numerosos municipios de nuestra Nación son las mujeres. El fundamentalismo islámico implica en no pocos casos, su exclusión educativa y profesional, la proliferación de matrimonios forzosos, la mutilación genital femenina o la imposición del burka y el niqab, ejemplos normalizados de opresión que han de ser prohibidos y combatidos por todas las administraciones competentes», denuncia Vox en la exposición de motivos de su PNL, donde también señala lo «llamativo» que resulta que «aquellos que se autoproclaman defensores de las mujeres en Europa sean los mismos que permiten la llegada masiva de culturas incompatibles con los derechos de las mujeres y que las denigran por el mero hecho de serlo».
Precisamente el pasado viernes, Vox invitó a comparecer a la Comisión de Mujer de la Asamblea de Madrid a la profesora Elena Ramallo, doctora en Derecho y activista por los Derechos Humanos, especialmente en la protección de mujeres y menores, que pronunció un firme alegato en contra del hiyab.
Una comparecencia que se encontró con las críticas de la izquierda, que calificaron a Ramallo de «racista, homófoba y machista», mientras que desde el Partido Popular se mostraron equidistantes entre el discurso de Vox, alineado con el de la profesora, y el del PSOE y Más Madrid.
La portavoz del PP en la Comisión de Mujer, Esther Platero, estimó que el debate sobre el uso del hiyab no puede «ser secuestrado por dos extremos que lo manipulan». «Ambos se equivocan y dañan a las mujeres musulmanas porque lo que hacen es dar un respuesta simple a un problema complejo», explicó.
Así, reprochó a la izquierda que «en nombre del respeto cultural, se vuelva cómplice del islamismo más reaccionario», y a Vox utilizar el hiyab para «atacar a comunidades enteras y para criminalizar a barrios y familias».