Felipe de Marichalar, en Madrid
Felipe de Marichalar, 'un Príncipe Harry' en la corte española
Cuarto en la línea de sucesión, los amigos del hijo de la Infanta Elena desvelan que se siente acechado por los paparazzis y le gustaría vivir en el anonimato
Felipe de Marichalar se escondía bajo una gorra en el desalojo de una sauna donde la Policía encontró un arma y droga
Felipe de Marichalar, de 24 años, tiene ganas de huir y conquistar el anonimato. Según asegura su entorno, se siente como el Príncipe Harry de la corona española. Acechado, observado, con la opinión pública diseccionando cada paso.
Cuarto en la línea de sucesión, considera que la prensa le persigue con el único fin de relacionarle con cualquier escándalo y sostiene que en muchas ocasiones se exageran los titulares para dañar su imagen.
Este sería el motivo por el que plantea poner tierra de por medio y empezar una nueva vida en Abu Dabi, cerca de su abuelo el Rey Juan Carlos. Los planes de futuro del hijo de la Infanta Elena serían trabajar de lunes a viernes en Emiratos Árabes, iniciando así su carrera laboral en el mundo de los negocios lejos del escrutinio público español.
Antes de marchar, Felipe de Marichalar disfrutó de un intenso fin de semana con sus amigos. El pasado domingo, la Policía Municipal de Madrid desalojaba un after de la calle Orense de la capital donde se superaba el aforo permitido y donde encontraron varias sustancias ilegales como la cocaína rosa. Entre los presentes se encontraba el nieto del Rey Juan Carlos.
Felipe y Victoria de Marichalar, en el funeral de Constantino de Grecia
El currículum de Felipe de Marichalar de altercados policiales es cada vez mayor. El pasado mes de diciembre, era también vinculado directamente con una reyerta callejera que se produjo en la puerta de una famosa discoteca madrileña, donde también acabó interviniendo la Policía. Ante los hechos, el hermano de Victoria Federica emitió un comunicado donde desmentía tener algo que ver con la sonada pelea: «Yo estaba en la puerta de la discoteca cuando pasó una cosa y ahora me quieren involucrar a mí, como si yo tuviera algo que ver con esa pelea. Yo si soy algo es una víctima. Y ni eso. Soy un testigo de lo que ha pasado», concluía.
Belén Perea es una de las amistades más cercanas de Felipe de Marichalar y hace muy poco habló sobre la situación que estaba viviendo su amigo con los medios. «Vosotros sois los que le ponéis en el ojo del huracán», decía la joven. Prosiguió defendiéndole, comentando que él no tenía el título de Rey y que salir de fiesta es una actividad normal que hacían todos los chicos de 25 años.
Felipe de Marichalar se ha comparado con el Príncipe Harry por las similitudes que pueden estar viviendo ambos con los medios de comunicación. Cabe recordar que el hijo menor del Rey Carlos III acaba de publicar unas memorias donde desvela muchos episodios desgarradores de su vida en palacio, lo que ha generado un sinfín de titulares que no dejan del todo bien a algunos miembros de la Familia Real británica.