El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, en una imagen de archivo
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La bronca de Marlaska a su llegada al Santiago Bernabéu
El ministro del Interior acudió al partido que enfrentaba al Real Madrid y al RB Leipzig
El Real Madrid recibió este miércoles al RB Leipzig y selló, con síntomas de sufrimiento, su paso a los cuartos de final de la Champions League. Hasta el Santiago Bernabéu se desplazaron, como es habitual, numerosos rostros conocidos de la crónica social –y de otra índole–, de nuestro país. Ejemplo de ello son María Pombo y su esposo, Pablo Castellano, que sorprendieron a su hijo mayor, Martín, regalándole una entrada para el partido; Nuria González, viuda de Fernando Fernández Tapias, o Federico Jiménez Losantos, entre otros.
Ha sido este último, precisamente, quien ha contado en Es la mañana de Federico, el programa que conduce en esRadio, el incidente que, al parecer, protagonizó Fernando Marlaska a su llegada el estadio, ubicado en el Paseo de la Castellana. Según el periodista, el magistrado y actual ministro del Interior llegó al enclave en compañía de ni más ni menos que quince escoltas, lo que incomodó a los allí presentes. «Le propinaron una bronca monumental cuando entró en el estadio. Dentro llevaba quince escoltas», ha contado Losantos.
A Marlaska se unió, de igual forma, María Chivite, presidenta del Gobierno de Navarra y secretaria general del Partido Socialista de la comunidad foral desde 2014. «No puedo detenerlo, es lo único que lamento. Estaba con la otra mejor amiga de ETA, la que viene de Navarra a cambio de dársela a Bildu», dijo Federico a la entrada, tras ver al ministro y ser abordado por un reportero del programa deportivo de Mega, El Chiringuito, que le preguntó por sus intenciones de acercarse y decirle algo al político.
En los últimos días, Marlaska ha copado varios titulares a razón de su posible implicación en el caso PSOE, una extensa trama de corrupción liderada por Koldo, la mano derecha de Ábalos, que se investiga para determinar los cobros ilegales en contratos de compra de mascarillas durante la pandemia del coronavirus.
Marlaska ha salido al paso de las acusaciones asegurando que el contrato de su departamento al inicio de la crisis sanitaria, adjudicado a la empresa en cuestión, se hizo «cumpliendo la ley». Unas palabras poco creíbles para muchos. «Fue un contrato perfectamente regular y que tenía por objeto responder a una emergencia sin precedentes, y hablo de servicios esenciales: de policías nacionales, de guardias civiles, de funcionarios de Instituciones Penitenciarias que debían de proceder a darnos seguridad a todos», ha señalado.
El ministro del Interior acudió acompañado de 15 escoltas
Su lado más desconocido
Marlaska nació en Bilbao en 1962, en el seno de una familia dedicada al Cuerpo de Policía Municipal y la costura. Tiene dos hermanas y antes de llegar a formar parte del Gobierno como responsable de uno de los departamentos en que se divide la Administración Superior del Estado, prestó servicio en el Juzgado de primera instancia de Santoña, en Cantabria; el juzgado número 2 de Bilbao, la Audiencia Provincial de Vizcaya o la Audiencia Nacional como magistrado sustituto del juez Baltasar Garzón.
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