El escáner se compone de 700.000 imágenes captadas por sumergibles
El Titanic como nunca antes se había visto: salen las primeras imágenes del escáner a tamaño real
El escáner congela los restos del naufragio en el tiempo y permitirá a los expertos estudiar minuciosamente todos los detalles
Este miércoles 17 de mayo, 38 años después del descubrimiento del pecio del Titanic se ha dado a conocer las imágenes del primer escáner digital a tamaño real que ofrece una reconstrucción completa en 3D del naufragio más famoso del mundo.
La popa, que se ha separado de la proa, es una caótica maraña de acero
Los expertos esperan que esto arroje nueva información sobre lo que le sucedió al transatlántico en su hundimiento en 1912. «Todavía hay preguntas, cuestiones básicas, que necesitan respuesta sobre el barco», declaró el analista del Titanic Parks Stephenson al medio BBC News. Y consideró que este modelo en 3D era «uno de los primeros pasos importantes para conducir la historia del Titanic hacia una investigación basada en pruebas, y no en especulaciones».
Desde el descubrimiento de sus restos en 1985, el Titanic ha sido objeto de numerosas exploraciones; sin embargo, debido a sus grandes dimensiones y la oscuridad de las profundidades, las cámaras no han podido capturar la totalidad del pecio hasta ahora. El nuevo escáner ha revelado una vista completa del transatlántico: las imágenes muestran dos partes, la proa y la popa que se encuentran separadas por unos 800 metros al igual que un enorme campo de escombros que rodea el buque destrozado.
Se espera que el escáner pueda revelar más sobre lo que ocurrió la noche en que se perdió el Titanic.
Hasta el minúsculo detalle
La exploración fue realizada en el verano de 2022 por Magellan Ltd, una empresa de cartografía de aguas profundas, y Atlantic Productions, que está realizando un documental sobre el proyecto.
Contaron con varios sumergibles controlados a distancia por un equipo a bordo de un buque especializado. Estos pasaron más de 200 horas inspeccionando el pecio a lo largo y ancho y tomaron más de 700.000 imágenes desde todos los ángulos para crear una reconstrucción 3D exacta.
Gerhard Seiffert, de Magellan y responsable de la planificación de la expedición, declaró que se trataba del mayor proyecto de exploración submarina que jamás había emprendido. «La profundidad, casi 4.000 metros, representa un reto, y además hay corrientes en el lugar, y no se nos permite tocar nada para no dañar el pecio», explicó.
Otro desafía al que se ha tenido que enfrentar el equipo de Seiffert ha sido tener que cartografiar cada centímetro cuadrado, «incluso las partes poco interesantes como los escombros donde se ha tenido que cartografiar el barro», detalla el experto. No obstante cada parte es necesaria «para rellenar los huecos de todos estos objetos interesantes», añade. El escáner muestra tanto la escala de la nave como algunos detalles minúsculos, como el número de serie de una de las hélices.
A pesar de que la proa se encuentra cubierta de estalactitas de óxido, aún sigue siendo reconocible al instante. En la parte superior se encuentra la cubierta del barco, en la que un enorme agujero deja entrever el vacío que ocupaba la gran escalera. Por su parte, la popa es un caos de metal: esta parte del barco se desplomó al hundirse en el fondo del mar.
En el campo de escombros que rodean al transatlántico hay objetos esparcidos, como ornamentos metálicos del barco, estatuas y botellas de champán sin abrir. También hay objetos personales, como docenas de zapatos que descansan sobre el sedimento.
Se pueden ver detalles extraordinarios del barco
«El verdadero estado del pecio»
Parks Stephenson, que ha estudiado el Titanic durante muchos años, confesó que se quedó «estupefacto» cuando vio los escáneres por primera vez. «Te permite ver los restos del naufragio como nunca podrías verlos desde un sumergible, y puedes ver los restos del naufragio en su totalidad, puedes verlos en contexto y perspectiva. Y lo que te muestra ahora es el verdadero estado del pecio».
Además destacó que el estudio de los escáneres podría ofrecer nuevos conocimientos sobre lo que le ocurrió al Titanic aquella fatídica noche de 1912. «Realmente no entendemos el carácter de la colisión con el iceberg. Ni siquiera sabemos si chocó por estribor, como se ve en todas las películas; podría haber encallado en el iceberg», explicó. El estudio de la popa, añadió, podría revelar la mecánica del impacto contra el fondo marino.
El mar está haciendo mella en el pecio, los microbios lo corroen y algunas partes se desintegran. Los historiadores son conscientes de que se agota el tiempo para comprender a fondo la catástrofe marítima. Pero el escáner congela los restos del naufragio en el tiempo y permitirá a los expertos estudiar minuciosamente todos los detalles. La esperanza es que el Titanic pueda desvelar sus secretos.
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