
Cuno (izquierda) con el presidente del Reich Ebert en la ceremonia de constitución frente al Reichstag (1923)
Hace 100 años en El Debate
11 de agosto de 1923: Cuno es derrotado en el Reichstag
Grupos comunistas habían intentado asaltar el Palacio Real y el Parlamento. Además, los obreros se hicieron con varias fábricas, izando la bandera roja
El Debate informaba que en la tarde del 11 de agosto de 1923 había sido aprobado en el Reichstag el voto de censura al Gobierno que habían presentado los comunistas. Como consecuencia, era inevitable la dimisión del canciller Cuno; algo que sucedería al día siguiente tras haber sufrido una serie de huelgas nacionales en Alemania contra su gobierno.
En enero de 1923, el gobierno de Cuno pidió resistencia pasiva a la ocupación belga y francesa de la región del Ruhr. Al mismo tiempo, la inflación en la República de Weimar estaba fuera de control, como resultado de los pagos de reparaciones o de los costos de la resistencia pasiva, lo que hizo que las autoridades locales y las empresas boicotearan a las fuerzas de ocupación mientras el gobierno pagaba los salarios de esas administraciones y compensó a las compañías de carbón y acero por sus pérdidas.
Los gastos causaron el colapso del Reichsmark, que ya había sido inflado. Durante 1923, el marco cayó de 21.000 al dólar estadounidense a principios de año a seis billones al final.
Según indicaba el periódico, la inminente caída del Gobierno había producido en la capital un «verdadero pánico». Se hablaba ya de una huelga general y «hasta de posible guerra civil» ya que el descontento entre las masas obreras era «hondísimo», «viéndose los jefes socialistas en la imposibilidad de contrarrestar la agitación» que iban sembrando los comunistas.De este modo, algunos obreros de las fábricas del norte de Berlín se habían tomado la justicia por su propia mano apoderándose de las fábricas, izando la bandera roja y declarándolas de propiedad común a la misma, según detallaba El Debate.