Giulia Cecchettin junto a su presunto asesino, Filippo Turetta
La historia del crimen
La reconstrucción minuto a minuto del asesinato de Giulia Cecchettin, el crimen que ha conmocionado Italia
La joven fue asesinada por su novio, Filippo Turetta, quien la mató de 26 puñaladas durante 22 minutos de agonía para Giulia
El pasado sábado la joven italiana Giulia Cecchettin, de 22 años, fue brutalmente asesinada por su novio, Filippo Turetta, quien fue detenido en Alemania después de que la Policía encontrase un cuchillo de cocina de doce centímetros de hoja dentro de su mochila. Se trata del arma del crimen.
La sangre encontrada por los agentes en los zapatos del joven, en la ropa y en los asientos del Fiat Punto negro que localizaron con los faros apagados en el carril de emergencia de la autopista Berlín-Múnich confirmaron que la noche del asesinato fue una auténtica masacre para Giulia.
Me puse el cuchillo en la garganta varias vecesAsesino de Giulia Cecchettin
«Me puse el cuchillo en la garganta varias veces», aseguró Turetta a la Policía alemana tras el crimen. Buscaba un barranco, un viaducto, pensaba degollarse. En definitiva, después de matar a Giulia, Filippo pensó en quitarse la vida. No tenía, por tanto, un destino, no huía de Vigonovo, de Torreglia, de Fossò, de los lugares de su vida donde cometió el atroz crimen. Según asegura Corriere de la Sera, recorrió más de mil kilómetros, atravesando las llanuras venecianas y friulanas, y luego tomó la ruta de la montaña para deshacerse del cuerpo de Giulia, encontrado en un barranco rocoso cerca de Piancavallo.
A partir de ahí, según las declaraciones del propio feminicida, habrían sido seis días de vagabundeo en su coche, con 300 euros en el bolsillo y la idea de un acto extremo. No lo hizo y así su paseo terminó junto con la gasolina y el dinero. Sólo le quedaban unos pocos euros en el momento de la detención.
La noche del sábado
El sábado 11 de noviembre Giulia y Filippo fueron a cenar a un McDonald's ubicado dentro del centro comercial Nave de Vero, en Marghera, a unos treinta kilómetros de Vigonovo (Venecia), donde Giulia vivía con su padre y su hermano. Turetta recogió a Giulia en su Fiat Punto negro y aunque sobre las 11 de la noche estaba decidido a llevarla a casa, en un aparcamiento situado a 150 metros del domicilio de la joven, la situación comenzó a volverse violenta.
Filippo, estudiante de la Universidad de Padua, comenzó a actuar de forma agresiva contra su pareja. Según afirma un vecino que presenció la escena desde su ventana a Corriere de la Sera, «se escuchaba una voz femenina que gritaba 'así me haces daño' y pedía ayuda..... Vi cómo él la pateaba mientras ella estaba en el suelo, y luego vi cómo un coche de color oscuro se alejaba con ambos (en referencia al vehículo de Filippo)». El vecino llamó a Emergencias para intentar socorrer a la joven, pero no llegaron a tiempo.
Los Carabinieri encontraron sangre, cabellos y una cinta de tela plateada que muy probablemente utilizó «para evitar que gritara»
La siguiente escena se desplaza unos kilómetros más allá, a la zona industrial de Fossò. Las cámaras del sistema de videovigilancia de las fábricas Christian Dior y Speedlogistik lo filmaron. «A las 23.40 horas, una persona huye perseguida por otra, más rápida, que la alcanza y la tira al suelo... el perseguido cae violentamente sobre la acera y no se mueve...». Turetta arrastró a su novia, tal y como aparece en las grabaciones, salió del encuadre de la cámara para poco después reaparecer con un Fiat Punto negro que se detiene. Filippo se bajó, cargó el cadáver en el coche y se marchó del lugar. Allí los Carabinieri encontraron sangre, cabellos y una cinta de tela plateada que muy probablemente utilizó «para evitar que gritara». Fueron 22 minutos de «ferocidad sin precedentes», el calvario de Giulia.
26 puñaladas
El cuerpo sin vida de Giulia fue encontrado una semana después entre Piancavallo y el lago Barcis, en los Prealpes friulanos. «Estaba tendida en el suelo, oculta en un barranco rocoso, diez metros por debajo de la carretera». El forense, en su inspección externa del cadáver, encontró 26 heridas e hizo una macabra lista de ellas. «En la cara, cuello, brazos, piernas... atribuibles a la acción de una o más armas blancas». Cuchillos, en concreto. Y concluyó así: «Dinámica homicida voluntaria perpetrada mediante múltiples golpes de arma blanca con intento de defensa de la víctima y posterior ocultación del cadáver». Giulia luchó con todas sus fuerzas para no morir. No lo consiguió: 'Shock hemorrágico'.
La ruta de huida de Filippo
Según informa Il Mattino di Padova, ciudad en la que estudiaba en asesino, la ruta de la huida de Filippo Turetta en Italia, de Fossò a Dobbiaco pasando por Friuli y Cortina, ha sido reconstruida al detalle por los investigadores. Pero aún queda por aclarar cuál fue su ruta en el extranjero, cómo consiguió Filippo llegar a Bad Durremberg, entre otras cosas, detenido mientras se dirigía hacia el sur.
La hipótesis de los Carabinieri del comandante provincial Nicola Conforti, coordinados por el fiscal adjunto Andrea Petroni, es que Turetta pudo haber estado en otros países además de Austria, como es el caso de República Checa. Otras comprobaciones para reconstruir la semana en el extranjero se refieren a la cuenta de Paypal activada por el joven, que –especulan los investigadores– podría haber utilizado, además del dinero en efectivo, para sobrevivir, volcando el dinero en tarjetas de prepago y eludiendo así la alerta que se había colocado en su cajero. Los investigadores también deben dilucidar si el joven activó una tarjeta sim extranjera para utilizar un teléfono u otro tipo de dispositivo.
Comentarios
