
El dictador Nicolás Maduro y el presidente electo de Venezuela Edmundo González Urrutia
Maduro cumple 100 días usurpando el poder en Venezuela: profundiza la crisis económica y evita chocar con Trump
En paralelo se cumplió el 215 aniversario del «primer grito» de independencia de Venezuela que tanto opositores como chavistas celebraron por separado
Este fin de semana, opositores y chavistas celebraron por separado y con matices claramente diferentes el 215 aniversario del «primer grito» de independencia de Venezuela, una fecha que también coincidió con los 100 días desde que Nicolás Maduro usurpó la presidencia del país sudamericano el 10 de enero tras el fraude electoral del 28 de julio de 2024.
Maduro expresó que el 19 de abril de 1810 fue el «inicio de una historia heroica de lucha por la libertad, la independencia, la igualdad y contra el colonialismo en todas sus formas». De forma similar, el canciller chavista Yván Gil, dijo en Telegram, que, hace 215 años el pueblo venezolano «inspirado por los ideales de justicia y libertad, se levantó contra el yugo colonial».
En 1810, el Cabildo de Caracas destituyó al capitán general Vicente Emparan y formó una «Junta de patriotas», con lo que se inició la lucha por la independencia de Venezuela, declarada oficialmente el 5 de julio de 1811.
Durante los actos oficiales de celebración de esta fecha en el Panteón Nacional de la capital venezolana, donde reposan los restos de próceres de la independencia como el libertador Simón Bolívar, Nicolás Maduro Guerra, hijo del dictador chavista, dijo que en aquel entonces «el pueblo de Caracas desconoció la autoridad del imperio español y asumía soberanamente el poder».
Venezuela «clama por un cambio»
Lo que no dicen los dirigentes chavistas es que ellos irrespetan y pisotean la memoria de quienes dicen honrar, pues Maduro y el chavismo desconoció la soberanía popular manifestada en las elecciones presidenciales del año pasado en las que la oposición, con Edmundo González Urrutia como candidato presidencial, ganó ampliamente aquella contienda.
Precisamente, González Urrutia, en el exilio desde septiembre del año pasado tras denunciar una «persecución» en su contra, aseguró el sábado que Venezuela «clama por un cambio», al igual que hace 215 años.
«Hoy, como entonces, el país clama por (un) cambio. Por dignidad. Por libertad. Somos herederos de un espíritu indomable que no se rinde ante la adversidad. El compromiso con Venezuela es firme. La lucha es por un país libre, justo y en paz», agregó en la red social X.
Este mensaje fue secundado por el partido opositor Voluntad Popular (VP), que forma parte de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD). En una publicación también en X señaló que aquel 19 de abril no solo marcó el comienzo de la independencia, sino también «el nacimiento de una convicción profunda», la de que los venezolanos no aceptan «cadenas ni tiranías».
«Hoy, como ayer, seguimos luchando por la libertad. Enfrentamos a un régimen que ha secuestrado nuestras instituciones, pisotea nuestros derechos y pretende eternizarse en el poder. Pero así como aquel día nuestros antepasados dijeron 'no' al dominio colonial, hoy millones de venezolanos decimos 'no' a la dictadura de Nicolás Maduro», publicó en X Voluntad Popular (VP).
Se profundiza la crisis venezolana
Tras la vacía retórica chavista, la verdad de los hechos es que Maduro lleva 100 días usurpando el Palacio de Miraflores y capitaneando un régimen que hunde cada vez mas la maltrecha economía venezolana.
Washington endureció las sanciones contra los negocios de la dictadura venezolana tras el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca, poniendo fin a las licencias petroleras e imponiendo aranceles del 25 % a los compradores de crudo venezolano, así como tarifas del 15 % a productos importados desde la nación caribeña. El mandatario republicano acusa a Caracas de haber enviado a EE.UU. a «decenas de miles de criminales» muchos de ellos miembros de la peligros banda del Tren de Aragua.
Maduro insiste en que «no hay amenaza en el mundo que intimide» a su país, y decretó este mes un Estado de emergencia económica en respuesta a las medidas de tomadas por la administración Trump, pero ha evitado a toda costa atacar directamente al mandatario estadounidense. Caracas también emitió una «alerta de viaje» sobre «riesgos» en EE.UU.
Con las sanciones impuestas al petróleo venezolano, el régimen chavista ya no se beneficiará de las jugosas ganancias del comercio de hidrocarburos con Estados Unidos y también verá crecer la presión social interna hasta ahora aliviada por la emigración masiva hacia EE.UU. al tiempo que notará la caída del envío de dinero realizado por la diáspora venezolana radicada en sueleo estadounidense.
Sin embargo, desde antes de la imposición de las sanciones estadounidenses, desde el propio día del inicio de la usurpación el 10 de enero, la moneda local se ha devaluado un 33 % frente al dólar en el mercado oficial, donde el tipo de cambio pasó de 53,87 bolívares a 80,95, un alza del 50,26 %, mientras que la tasa paralela superó los 100 bolívares. Según expertos, ese incremento explica la subida de precios, en su mayoría fijados con base en esta divisa.
El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) registró una inflación acumulada del 36,1 % en el primer trimestre
En este contexto, sindicalistas y trabajadores exigen un aumento del salario mínimo, que actualmente equivale a 1,60 dólares mensuales, sin incluir los bonos que reciben los empleados públicos, cuando una persona necesita alrededor de 100 dólares al mes como mínimo para hacer frente a los gastos básicos de alimentación, según estimaciones independientes.