
Israel sufre su noche más sangrienta tras nuevas oleadas de bombardeos iraníes que dejan ocho muertos y más de 150 heridos
Israel sufre su noche más sangrienta tras nuevas oleadas de bombardeos iraníes que dejan ocho muertos y más de 150 heridos
Ocho personas han perdido la vida y más de 150 han resultado heridas en los ataques más devastadores contra territorio israelí desde el inicio de la ofensiva entre ambos países
Las Fuerzas de Defensa de Israel han respondido con bombardeos sobre instalaciones estratégicas en Irán
La trampa de Israel para acabar con la cúpula militar de Irán: así planearon su gran ofensiva
Israel ha despertado este domingo en medio de la conmoción y la destrucción, tras ser blanco de dos nuevas series de bombardeos lanzados desde Irán durante la noche, los cuales han causado un saldo provisional de ocho muertos y más de 150 heridos, además de cuantiosos daños materiales. Estas nuevas ofensivas representan el episodio más letal para la población israelí desde que el país iniciara una operación militar a gran escala contra Irán el pasado jueves por la noche.
La quinta oleada de misiles impactó en el norte del país, especialmente en la localidad de Tamra, próxima a Haifa, donde la policía ha confirmado el fallecimiento de cuatro mujeres de una misma familia: dos de ellas de aproximadamente 40 años, una joven de 20 y una menor de 13. Equipos de rescate han intervenido en la zona para liberar a varias personas atrapadas entre los escombros, muchas de las cuales presentan heridas de diversa gravedad.
Ya en la madrugada del domingo, se produjo una sexta oleada de ataques que afectó a dos zonas adicionales: Bat Yam, al sur de Tel Aviv, y la región de Sefelá, en las proximidades de Jerusalén. En Bat Yam, el servicio de emergencias israelí, Magen David Adom (MDA), ha informado del fallecimiento de otras cuatro personas —una mujer de 69 años, otra de 80 y dos niños de aproximadamente 10 años—, así como de al menos un centenar de heridos. Entre los lesionados se contabilizan cuatro en estado crítico y otros siete con heridas moderadas.
En paralelo, la región de Sefelá también ha sufrido daños tras recibir impactos directos. En este enclave se ha atendido a 37 personas heridas: dos de ellas en estado grave, doce con heridas moderadas y otras veintitrés con lesiones leves, según ha confirmado también el MDA.

La quinta oleada de misiles impactó en el norte del país, especialmente en la localidad de Tamra
El número de víctimas mortales se eleva así a once desde el inicio de la ofensiva israelí contra Irán, incluyendo tres fallecidos en Tel Aviv durante jornadas anteriores. Sin embargo, las autoridades han advertido que la cifra podría aumentar en las próximas horas, ya que continúan las labores de búsqueda entre los restos de varios edificios colapsados, entre ellos uno de ocho plantas.
Israel responde a los bombardeos
En respuesta a estos ataques, el ejército israelí ha llevado a cabo una nueva ronda de bombardeos sobre territorio iraní. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han confirmado que sus objetivos incluyeron instalaciones del Ministerio de Defensa iraní, así como la sede de la Organización de Innovación e Investigación Defensiva (SPND), entidad vinculada al desarrollo del programa nuclear de Teherán. Además, medios iraníes han reportado un incendio de grandes proporciones en la refinería de Shahran, ubicada cerca de la capital, posiblemente como resultado de estos ataques.

Israel ha despertado este domingo en medio de la conmoción y la destrucción
Según fuentes iraníes, los bombardeos israelíes han dejado más de un centenar de muertos desde la noche del jueves, entre ellos altos cargos militares y científicos nucleares relacionados con los programas de enriquecimiento de uranio. Aunque las autoridades iraníes no han confirmado aún el número exacto de víctimas, el alcance de los daños parece haber sido considerable, especialmente en infraestructuras estratégicas.
La escalada bélica entre ambos países ha alcanzado un nivel sin precedentes en los últimos años, con un intercambio de ataques directos que amenaza con desestabilizar aún más la ya frágil situación en Oriente Medio. La comunidad internacional, por su parte, sigue con preocupación el curso de los acontecimientos, mientras el número de víctimas continúa creciendo.