Los mecánicos nunca recomiendan llenar el depósito hasta arriba
Mantenimiento
Los mecánicos desautorizan a la DGT: no conviene llenar el depósito antes de viajar
Aunque la mayor parte de los conductores tienen la manía de repostar el depósito hasta la boca antes de viajar, conviene saber las razones por las que los mecánicos no lo recomiendan
Tradicionalmente la Dirección General de Tráfico recomienda llenar el depósito de combustible antes de ponernos en carretera.
Se trata de una medida que desde su punto vista es bueno fundamentalmente por seguridad, pues si ocurre cualquier contratiempo en carretera como puede ser un atasco o similar tenemos reservas de energía más que suficientes para, por ejemplo, climatizar el coche.
Reserva de energía
Frente a ello hay varios motivos que lo desaconsejan, alguno que nos daría incluso cualquier mecánico.
El primer motivo tiene que ver con el consumo del vehículo, es de sentido común que al llevar el depósito del coche lleno incrementamos el peso, lo que también podría penalizar ligeramente el gasto por kilómetro.
Ni lleno ni vacío, conviene salir con el depósito por encima de tres cuartos
Mientas, los mecánicos desaconsejan salir a carretera con el depósito lleno por varios motivos, el primero es que en las curvas existe el riesgo de que parte del carburante se derrame por la válvula de seguridad que llevan los coches en la zona del tapón del carburante.
Se sale en las curvas
El problema es que el combustible puede desplazarse en las curvas y esta válvula de seguridad que hace de aliviadero provocará que lo tiremos. Habitualmente cae a través de un conducto que hay junto al neumático trasero que está cerca de la boca de repostaje.
Lo normal es dejar de echar combustible la primera vez que salta la pistola
Por si esto fuera poco tenemos el riesgo de provocar una avería, en este caso podemos estropear el canister, un filtro especial que llevan los coches para evitar que el olor a carburante entre al habitáculo.
El problema deriva de que cuando llenamos demasiado el depósito se llena también la zona de expansión de gases, precisamente lo que provocaría que el canister termine por estropearse, pues hay que tener en cuenta que su función es filtrar precisamente los gases y no empaparse de carburante.
Motivos más que suficientes por los que no hay que llevar el depósito lleno hasta la boca al ponernos en carretera, por muy cómodo que sea o muy barato que esté el carburante.