Cataluña tiene ya trasmitidas todas las competencias de tráfico
Impuestos
Cataluña avanza hacia su independencia automovilística tras lograr la gestión del impuesto de matriculación
Una nueva concesión de Sánchez permite que Cataluña esté a las puertas de recaudar otro impuesto que en este caso afecta a todos los automovilistas
Parece que las cesiones de Pedro Sánchez al independentismo catalán para mantener su gobierno impostado comienzan a llegar ya hasta el automóvil, pues la comunidad autónoma avanza poco a poco hacia su independencia automovilística.
Recordemos que Cataluña junto al País Vasco y Navarra tienen ya transferidas las competencias de tráfico desde hace años, e incluso la Guardia Civil de Tráfico se vio obligada a ceder allí sus atribuciones a las policías autonómicas, que son las que se hicieron cargo del control de las carreteras y de la aplicación del Reglamento General de Circulación.
Control local total
Ahora la Agencia Tributaria de Cataluña acaba de firmar un convenio de colaboración con la Agencia Estatal Tributaria con el objetivo de gestionar de manera conjunta los ingresos del Impuesto de Matriculación de los coches que lo tengan que abonar en la Comunidad.
La medida afecta a todos los coches vendidos en Cataluña
Este acuerdo se culminará en 2028 con la cesión de la recaudación de este impuesto así como de su gestión, una situación que de nuevo genera un agravio comparativo inédito frente a el resto de regiones españolas.
Agravio comparativo
Si tomamos los datos pertenecientes del año pasado, en Cataluña se vendieron unos 170.000 coches, lo que se tradujo en unos ingresos de 140 millones de euros vía impuesto de matriculación, una decisión que supone un paso más allá para la hoja de ruta catalana hacia la financiación singular que permitió a Illa llegar a la presidencia de la Generalidad con el apoyo de Esquerra.
La Agencia Tributaria de Cataluña avanza hacia su independencia
Así se abre un período de transición durante el cual la Agencia Estatal Tributaria permitirá a la Agencia Tributaria de Cataluña compartirá el uso de todas las plataformas informáticas necesarias para la recaudación de este impuesto así como su gestión integral, una prueba piloto que llevará a la gestión conjunta de otros impuestos que finalmente terminarán en manos catalanas para su organización y gasto.