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28 de marzo de 2024

Cartas al director

El espectáculo del trilero

Las sociedades posmodernas se caracterizan por la acumulación de espectáculos. El espectáculo no es sólo el producto de las técnicas masivas de difusión de imágenes, sino una forma de ver el mundo que se han imaginado, una forma de irrealidad que desplaza lo real y lo verdadero por lo falso. Cuando en un espectáculo se engaña lo real, la representación se convierte en finalidad última de las ideologías de simple apariencia, lo que importa es el relato para seducir al espectador al creer que participa en la falsa idea del relato, cuando en la realidad solo mira con las anteojeras.
Cuando un político como Pedro Sánchez tiene una absoluta fe en el espectáculo del «trilero» lo convierte en su triunfo, sin probabilidad de réplica. No hay ideas, no hay programas, solo queda puro relato para manipular sentimientos, con la palabra hueca. Como todo buen trilero, Sánchez sabe hablar, su arma es la palabra en el sermón dominguero, que retuerce, manipula, tergiversa, falsea y envilece hasta el infinito. Cuando habla, nada de cuanto sale de su boca puede ser tenido por cierto. Verdad es un concepto ajeno a su vocabulario. Más que despreciarlo, es estar enfrentado permanentemente con la verdad. Ha mentido tanto y a tantos que sus palabras, una a una, no tienen ningún valor. Por eso su relato se ha convertido en un desagradable «pito y abucheo» por donde va.
Los españoles, la inmensa mayoría, somos demócratas con mayoría de edad. Hartos de trampas y embustes, vertidos por los voceros de Sánchez en los medios de comunicación bien pagados con fondos públicos, se tapan la nariz, aunque no respiren, para esconder la putrefacción de sus palabras y sus acciones. Aplauden sus palabras triunfalistas desmentidas por los hechos. ¡Qué vergüenza de palmeros! Para matar el hambre.
Creer a Sánchez es un sufrimiento y sufrir su marrullería en directo son golpes bajos en la dignidad del ciudadano, es como un sacrificio para seguir viviendo con libertad…

Máximo de la Peña Bermejo

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