Fundado en 1910

24 de abril de 2024

TribunaLuis Peral

EE.UU.: el aborto ya no es un derecho

Lo que empieza en Estados Unidos, bueno o malo, se acaba extendiendo por todo el mundo occidental. La vida, la verdad, la ciencia y la ecología humana se acabarán imponiendo frente a la cultura de la muerte

Actualizada 06:46

El lunes 19 de junio, de 4 a 8 de la tarde, en el CEU (Julián Romea, 23, Madrid), vamos a escuchar a los protagonistas de una de las hazañas más heroicas de las últimas décadas. La protagonizaron las mujeres y hombres norteamericanos que, en un esfuerzo sostenido a lo largo de varias décadas, lograron revertir la aceptación social mayoritaria del aborto y, posteriormente, en más de la mitad de los estados de la Unión, la legislación que amparaba esa práctica aberrante en el segundo país occidental que legalizó el aborto (Sentencia Roe vs Wade de 1973).
No fue fácil, tuvieron que enfrentarse a múltiples obstáculos, desprecios y discriminaciones. Poderosas entidades, como entre otras Planned Parenthood, financiadas generosamente por personas y fundaciones con enormes recursos económicos, obstaculizaron todo lo posible sus valientes iniciativas. Pero tenían de su lado a Dios, a la verdad y a la ciencia. La ciencia cuyos avances en las últimas décadas ya no permitían ocultar durante más tiempo la realidad del ser humano concebido, que no es un mero apéndice de la madre sino alguien que tiene, desde el primer momento de la concepción, una dotación genética distinta de la de sus padres.
La verdad, que ya no se podía encubrir, sobre como en gestaciones avanzadas se utilizan métodos abortivos que producen un sufrimiento fetal incompatible con la prohibición de la tortura y de los tratos inhumanos y degradantes recogidas en los tratados internacionales sobre Derechos Humanos. La verdad sobre el síndrome posaborto y sobre el acoso laboral por embarazo o maternidad que sufren tantas mujeres, algo que jamás padecerá un hombre. La verdad de que en la ciudad de Nueva York los niños negros abortados superan a los que llegan a nacer.
Así se fue consiguiendo que la opinión pública en los Estados Unidos, y especialmente en los jóvenes, modificase su percepción sobre el aborto y sus consecuencias. Y este cambio en la opinión pública influyó en la política: cada vez más legisladores, federales y de los Estados, y más Gobernadores estatales acometieron, sin importarles la corrección política del momento, la reversión de las leyes que regulaban en los distintos Estados la práctica del aborto. Un proceso que culminó en la Sentencia del Tribunal Supremo del 24 de Junio de 2022 que estableció que no hay un derecho constitucional al aborto. Texas, Florida, Iowa, Missouri, Wisconsin, Ohio, Indiana, Nebraska, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Idaho, Arizona, Utah, Wyoming, Virginia Occidental, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Kentucky, Tennessee, Oklahoma, Arkansas, Luisiana, Georgia, Alabama y Missisippi han modificado, en algunos casos con anterioridad a la sentencia del Tribunal Supremo, su regulación del aborto, restringiendo abiertamente los supuestos legales y los plazos de su práctica.
Muy distinta ha sido la actuación del Tribunal Supremo americano de la de nuestro Tribunal Constitucional español, quien durante más de 11 años no fue capaz de aprobar una sentencia sobre el recurso de inconstitucionalidad contra la ley del aborto del 2010, con una voluntarista búsqueda de un consenso imposible entre sus magistrados y con argumentos tan peregrinos para no cumplir su obligación de juzgar como que se estaba en periodo electoral o que se estaba tramitando un proyecto de ley sobre el aborto. Hasta que llegaron Cándido Conde-Pumpido y sus dos colegas recusables y recusados y, enfangando sus togas en el polvo del camino, cumplieron en breves meses el mandato de quien les designó, y no sólo en el aborto sino también en la eutanasia y en la nefasta ley Celáa de educación.
Para dar a conocer a los políticos de todos los partidos, a la sociedad civil y a los medios españoles este heroico proceso de reversión en Estados Unidos de la regulación del aborto, varias entidades de la sociedad civil –Familia y Dignidad Humana, CEU-CEFAS, Federación Europea One of Us, Federación Española de Asociaciones Provida, Asamblea de Asociaciones por la Vida, la Libertad y la Dignidad, Political Network for Values y NEOS– han unido sus fuerzas para celebrar el 19 de junio el seminario «USA: el aborto no es un derecho. Hablan los protagonistas del cambio». Allí podrán escuchar a políticos, miembros de la sociedad civil y de los medios americanos explicarnos como lucharon y triunfaron en la defensa de la vida.
Algo que también ocurrirá en España. Lo que empieza en Estados Unidos, bueno o malo, se acaba extendiendo por todo el mundo occidental. La vida, la verdad, la ciencia y la ecología humana se acabarán imponiendo frente a la cultura de la muerte.
  • Luis Peral Guerra es coordinador del Grupo de Trabajo de Libertad en NEOS
Comentarios
tracking