Capsaicina: la sustancia picante que ayuda a quemar calorías y reduce el apetito

El mundo culinario puede dividirse en dos tipos de grupos de personas. Los que odian el picante y los que lo aman.

El picante lleva actuando como ingrediente esencial en la gastronomía desde mucho tiempo atrás. Descubierto en América hace más de 7.000 años, continúa siendo el favorito entre los paladares de muchos comensales.

Hoy en día, este ingrediente se ha convertido en el protagonista de innumerables platos exquisitos. Las variedades picantes, en particular, son de las más empleadas en la gastronomía de países como India, México y otros con tradiciones culinarias intensas.

El componente principal que causa la sensación de picante en los alimentos, es la capsaicina. Un alcoide que se encuentra en los pimientos y chiles. El elemento que activa los receptores del dolor y el calor, por lo que provoca esa sensación de ardor en la boca.

Esto se debe a que la capsaicina interactúa con los receptores TRPV1, que se encuentran repartidos en la zona bucal, en lengua y paladar, los cuales responden con calor y dolor físico.

Este componente, además de ser el irritante ingrediente que conquista la gastronomía mundial, también se trata de un elemento con severas propiedades terapéuticas, medicinales, nutricionales y beneficiarias para nuestro cuerpo.

Ventajas de la capsaicina

Comenzando por algunos de los beneficios más destacados: el aumento en el metabolismo, la reducción de la grasa temporal y una disminución del apetito. Esto ocurre debido a la reacción corporal que ya se ha mencionado, la capsaicina interactúa con los receptores TRPV1, que se encuentran repartidos en la zona bucal, en lengua y paladar, los cuales reaccionan proporcionando calor y dolor físico.

Además de incrementar la temperatura corporal, lo que a la vez aumenta el metabolismo y quema las calorías. La capsaicina también puede influir en la sensación de saciedad, reduciendo el apetito y promover la oxidación en grasas.

Esta sustancia también es utilizada como herramienta potencial para el tratamiento de daños musculares y articulares. Gracias a su aplicación en forma de crema o parches, esta actúa disminuyendo el dolor al afectar directamente a las células nerviosas.

Aunque esta ventaja continúa siendo investigada, este elemento contiene efectos anticancerígenos y actúa como protector cardiovascular. Esto ocurre debido a que estudios recientes, sugieren que este elemento inhibe el crecimiento de las células cancerígenas, promoviendo su eliminación, sin afectar a las células beneficiosas para nuestro cuerpo.

Finalizando, también contiene propiedades antinflamatorias, contribuye a la liberación de endorfinas, mejora la digestión, entre otras ventajas más que la capsaicina aporta a nuestro bienestar.

Como puede comprobarse, el picante es odioso para algunos por la sensación que puede causar al introducirlo en nuestra boca, sin embargo, no todo es dolor. Solo por la cantidad de ventajas que ofrece a nuestro cuerpo, debería de hacer replantearnos la posibilidad de ingerir de vez en cuando algo de picante.