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En primavera llegan las alergias y surge la duda: ¿puedo ponerme las lentillas?

La rinoconjuntivitis estacional por alergia a pólenes, antes llamada fiebre del heno, afecta en España a más de ocho millones de personas, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), la mayor parte de ellos son alérgicos al polen de gramíneas, olivo, arizónica y plátano de sombra. Esta alergia estacional suele empeorar entre marzo y septiembre, especialmente cuando hace calor, humedad y viento relacionado con la época en la que el recuento de polen está en su punto más alto.
Una de las manifestaciones más frecuentes de la alergia estacional es la rinoconjuntivitis alérgica, con síntomas que afectan a la zona de nariz y ojos: congestión nasal, estornudos, secreción nasal, inflamación y también síntomas oculares. A nivel ocular y según cada persona, estos alérgenos, principalmente producen una inflamación de la conjuntiva que recubre la parte anterior del globo ocular y la parte interna de los párpados y como consecuencia pueden aparecer problemas, como enrojecimiento ocular, picor de ojos, ojos llorosos, párpados hinchados o sensibilidad a la luz entre otros.

Se pueden usar lentillas si tengo alergia

Suelen surgir preguntas relacionadas con la conveniencia o no, de llevar lentes de contacto en las personas que tienen alergia, sobre todo en los que son nuevos usuarios y pueden tener más dudas al respecto. Aparecen informaciones que no siempre son las más correctas, otras inducen a equívocos o son falsos mitos, así que lo trataremos de aclarar.
Estos molestos síntomas de la alergia no deberían ser, en principio, un impedimento para seguir usándolas, ni tienen por qué empeorar con el uso de las lentes, aunque es necesario tener alguna precaución para evitar que en esa época su uso sea menos cómodo que habitualmente o que incluso provoquen algún tipo de irritación o molestia.
Pero en realidad, en la mayor parte de los casos es posible evitar o disminuir esas molestias estacionales a través de las indicaciones y criterios aplicados en la adaptación que el óptico–optometrista realiza en esos pacientes. Se trata básicamente de adecuar el tipo de lente, reemplazo y tiempo de uso a las necesidades de cada paciente.
Eso sí, se deberán extremar los cuidados oculares en aquellas personas que sufran los síntomas derivados de la rinoconjuntivitis alérgica estacional, sobre todo en épocas de polinización.
Hoy en día disponemos de materiales y regímenes de uso y reemplazo que pueden evitar o minimizar los problemas relacionados con el uso de lentillas en esta época. También hay una serie de consejos que es importante conocer o recordar para ponerlos en práctica siempre, pero especialmente en esta época.

Ocho consejos para alérgicos

Estos consejos deben tenerlos presentes tanto los usuarios de lentes de contacto como cualquier persona que sufra este problema.
1- Lavarse las manos con frecuencia ayudará a eliminar los alérgenos adheridos. También la ducha elimina polen de la piel y el pelo, como también lo hace cambiar con frecuencia la ropa de vestir.
2- Evitar frotarse los ojos. Cuando se siente un gran picor, es un gesto instintivo el rascarnos, pero en los ojos no es conveniente porque solo conseguiremos empeorar el picor y aumentar la inflamación. Es difícil resistirse, pero es muy importante evitar este gesto.
3- Al regresar a casa, usar una solución salina sin conservantes ayuda a limpiar los ojos y eliminar los restos de polen. También, si es necesario a lo largo del día, utilizar con frecuencia esta solución salina o lágrima artificial para humedecer, aclarar y ayudar a arrastrar de la superficie ocular los alérgenos con mayor rapidez. Que sean siempre productos específicos para el uso en los ojos: solución salina monodosis sin conservantes y humectantes o lágrimas artificiales con poca viscosidad. El óptico optometrista te recomendará las más adecuadas.
4- Consultar los niveles de polen en tu zona ayudará a saber cuándo se deben extremar las precauciones.
5- Tener en cuenta al ventilar la casa que los niveles más bajos de polen se registran generalmente antes del amanecer, al finalizar la tarde y temprano en la noche. Evitando la mañana, primera hora de la tarde y el mediodía, que es cuando se produce mayor polinización.
6- Viajar en coche con las ventanillas cerradas y evitar paseos por el campo o lugares donde haya mucha concentración de polen.
7- Protegerse con unas gafas de sol en el exterior.
8- En el interior, hay filtros de los aparatos de aire acondicionado específicos para el polen.

Qué hacer si uso lentillas

Es posible continuar usando las lentillas si se tiene alergia teniendo en cuenta una serie de recomendaciones para evitar o reducir al máximo la irritación de los ojos:
  • Utilizar las lentillas que se adapten a las necesidades oculares, a ser posible, las desechables diarias. Estrenar lentes de contacto cada día reduce los restos de depósitos y también de polen que causan la alergia, son más higiénicas, evitamos riesgos y no necesitan mantenimiento. El óptico-optometrista será quien recomiende la lente adecuada en cada caso.
  • Si no son de las que se tiran cada día, se deberá ser particularmente cuidadoso en la limpieza, usando el limpiador y desinfectante que recomiende el optometrista y que ayudará a eliminar suciedad y restos de polen que puedan adherirse.
  • Durante el uso de las lentes el uso de gotas lubricantes facilitará la eliminación de las partículas alergénicas que se depositan en la superficie del ojo y de la lente. Además, en caso de picor, estas gotas alivian y calman la irritación.
  • Disminuir las horas de uso de las lentillas en periodos de alta concentración de polen que adherido a la lente causa más molestias o en los días de más molestias. Si hay que elegir el uso solamente durante unas horas al día, la tarde o noche es cuando menos cantidad de polen hay en el ambiente. Durante el día especialmente durante la mañana, viene muy bien protegerse con unas gafas de sol cuando se salga al exterior.
  • Si aun así se tienen síntomas evidentes de conjuntivitis (sea o no alérgica), no usarlas hasta que hayan disminuido, ya que solo se conseguiría agravarlo.
  • Consulta con tu óptico optometrista o tu farmacéutico para que te recomienden productos específicos para los síntomas de la alergia en los ojos que se puedan usar con lentillas o que sean beneficiosos después de su uso: lubricantes, baños oculares….
  • Si durante la época de alergia se hubieran prescrito fármacos para la alergia estacional (antihistamínicos o antiinflamatorios), estos aliviarán el problema, pero es importante que sean compatibles con las lentes de contacto. El médico o el óptico-optometrista aconsejarán sobre ello, pero siempre es necesario quitarse las lentes de contacto antes de ponerse el fármaco y esperar unos 5 minutos para volver a ponérselas.
  • En el caso que sufrir un brote agudo siempre hay que suspender el uso de lentillas hasta que la situación vuelva a la normalidad.

Y en cualquier caso...

Siempre se suspenderá el uso de las lentes de contacto si empeoran los síntomas o si empeora o aparece mayor irritación, dolor, secreciones o pérdida de visión.
Así que, aunque con las debidas precauciones se pueden seguir usando las lentillas con normalidad, otras veces será mejor utilizar las gafas, porque en esos casos es siempre mejor dejar de usarlas hasta que se produzca una mejoría de los síntomas.
  • Dra. Sara Bueno Fernández, directora del Grado de Óptica y Optometría de la Universidad CEU San Pablo
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