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Imagen de un médico de cabecera

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Reino Unido pide a los médicos que dejen de dar bajas laborales: «Hay que mandarlos al gimnasio»

Cada región recibirá 100.000 para mejorar los equipos especializados de los centros médicos

El Gobierno británico está cansado de las bajas laborales. En un intento por transformar la manera en la que el sistema de salud del país enfrenta los parones laborales por enfermedad, el Ejecutivo ha decidido sacar a la luz un proyecto en el que los médicos, en vez de dejar a sus pacientes en casa, deben derivarlos, dependiendo de la gravedad de la situación, a terapeutas, asesores laborales o incluso al gimnasio.

Uno de los creadores de esta medida ha sido Wes Streeting, secretario de Salud, quien ha explicado que todo se ha hecho con un objetivo claro, y es el de cambiar el rumbo y apoyar a «a quienes pueden y quieren volver al trabajo», ya que, ha afirmado que no se puede seguir descartando a las personas como «si no tuvieran otra opción», anota The Times, que se ha hecho eco de la noticia.

Según el medio, el Sistema Nacional de Salud de Reino Unido (NHS) entrega de media al año 11 millones de bajas. De este total, cerca del 93 % son catalogadas como personas «no aptas para trabajar», las cuales no reciben opciones de tratamiento o soluciones reales que le ayuden a mejorar en un corto plazo de tiempo. Esta situación ha ido aumentando con el tiempo. Desde 2015 los datos se han duplicado. En ese año se emitieron 5,3 millones de incapacidades laborales.

Con la intención de ver su funcionalidad, el Gobierno de Reino Unido ha decidido implementar el nuevo programa –bautizado como WorkWell–en 15 regiones de Inglaterra. Así, han explicado que, con la intención de que se lleve a cabo y no caiga en el olvido, cada región recibirá 100.000 para mejorar los equipos especializados de los centros médicos. Sin embargo, no valdrá cualquiera, sino que tendrán que estar asociados a la propuesta. Por ello, deberán contratar asesores de empleo, fisioterapeutas, entrenadores de gimnasio y cursos de relajación, entre otros.

La idea es sencilla. Con esto se asegurarán de que un paciente con depresión, en vez de quedarse en casa, acuda al centro para empezar a sentirse mejor lo antes posible. Además, recibirá orientación para reincorporarse al trabajo lo antes posible y que su incapacidad no afecte a su curriculum vitae. Lo mismo pasará con alguien recién operado. Deberá ser derivado inmediatamente a un centro con rehabilitación. Así se evitará que se quede en casa y no mejore con el tiempo.

Una intención: mejorar la economía

Esta medida no es solo para mejorar el sistema sanitario, sino para dar un impulso a la economía del país. En este sentido, el secretario de Salud asevera que, actualmente, hay «2,8 millones de personas sin empleo por razones de salud». Esto, garantiza, es «un problema para ellos, para el NHS y para el país entero». Para más inri, estas bajas están costando miles de millones al erario público.

Si esto va bien, en 2026 todo el país entero podría tener instalado el proyecto.

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