Una enfermera atiende a un bebé recién nacido
Acusan al Gobierno de usar el blindaje del aborto en la Constitución para «ocultar sus escándalos»
Una de las cosas que busca el Ejecutivo de Sánchez es «impedir» que las mujeres que deseen acabar con la vida de su feto reciban «información falsa o engañosa» o «sin evidencia científica»
El 'no a la vida' por parte del Gobierno cada día es más firme. La última noticia ha llegado este viernes. Tras el avance de Vox –aprobado por el PP– para ofrecer información sobre el «síndrome posaborto» a las mujeres que quieran abortar, el Gobierno ha propuesto blindarlo en la Constitución española para «consagrar la libertad y la autonomía de las mujeres». Si lo consiguen, España se convertiría en el segundo país del mundo en dar luz verde a este polémico acto.
Con esta inclusión, una de las cosas que busca el Ejecutivo de Sánchez es «impedir» que las mujeres que deseen acabar con la vida de su feto reciban «información falsa o engañosa» o «sin evidencia científica», que pueda coaccionarlas, para lo que tiene previsto modificar el Real Decreto 825/2010. A pesar de su empeño por inculcar cada vez más la cultura de la muerte en la sociedad, Álvaro Ortega, director de la clínica Fertilitas y presidente de la Fundación +Vida, lo tiene claro. En este sentido, denuncia que estamos ante «un auténtico disparate».
Primero, señala el presidente de la Fundación + Vida, vemos cómo el Gobierno preparó el terreno con el portal público QuieroAbortar.org, donde solo se ofrece como solución «acabar con la vida de un hijo» sin dar ninguna medida de ayuda o recurso a la mujer que se encuentra en situación de dificultad. Si de verdad estamos ante un gobierno progresista, prosigue, «¿dónde está el progreso? ¿Dónde está la protección a la mujer? Tanto que enarbolan la bandera del feminismo, cuando el verdadero feminismo es apoyar a la mujer en situaciones de vulnerabilidad».
«Cabe recordar al Gobierno», anota Ortega, que la Constitución española nació para proteger la dignidad de todas las personas y la vida humana, por lo que incluir el aborto es «una incoherencia histórica». Además, reza que ninguna ley ni reforma puede legitimarse si «deja de proteger al más débil, que es el concebido», y, acabar con una vida humana, en cualquier etapa de su desarrollo, rompe el principio más básico de justicia.
Del mismo modo, el director de la clínica Fertilitas también menciona el artículo 15 de la Constitución, que dice que «todos tienen derecho a la vida». Se redactó así para «incluir también la protección del concebido. Es importante recordarlo: la vida humana está protegida en la Constitución, y el aborto sigue siendo inconstitucional», aclara. Asimismo, denuncia que va «en contra de los derechos fundamentales y del pacto de convivencia que permitió instaurar la democracia en España».
Para Alicia Latorre, presidenta de la Federación Española de asociaciones Provida, las intenciones del Gobierno están «bien claras». Señala que lo busca es «cerrar la puerta a que la ley del aborto pueda cambiarse», una ley que en estos momentos reconoce como «un derecho» el quitarle la vida a un ser humano inocente, lo que, según ella, va contra «el derecho natural, el sentido común y cualquier conciencia honesta». «Después de las artimañas para una votación ante el recurso de inconstitucionalidad en la que parte del tribunal estaba recusado, quieren impedir que alguien cuestione, que alguien destape todo lo sucio y cruel que este tema oculto», confiesa.
A la vez, recuerda que «el derecho a la vida existe» y las sociedades avanzadas lo reconocen y se aseguran de que se lleve a cabo. Así, apunta que la ley no da derechos, solo los reconoce. «Podemos inventar derecho a lo que se nos ocurra, pero no serían auténticos derechos, incluso se podría legitimar algo injusto y malo, como es el caso del aborto».
Al hilo, sujeta que preguntaría al Ejecutivo de Sánchez qué intereses lo mueven «a esta agresión desesperada hacia la vida inocente, hacia la verdad, hacia la compasión, hacia el bien...». También le gustaría saber por qué existe esa «sed de sangre, ese abandono de la mujer antes, durante y después». Además, comenta que les animaría a presenciar algún aborto, escuchar a mujeres agobiadas, presionadas a quienes no quieren darle información veraz.
Por último, afirma que el lenguaje eufemístico, la imposición y criminalización hacia quien ayuda y toda la apisonadora de la cultura de la muerte «no desanimarán ni ahogarán las voces de la vida», ya que cada día se salvan vidas, cada día se acoge y acompaña a personas profundamente heridas, cada día se despiertan conciencias.
Por su parte, Ana Ruiz, responsable del Refugio Provida, solo espera que «no salga adelante», porque para aprobarlo necesitan los votos del PP. Lo que están haciendo, confiesa, es una atrocidad, ya que deciden «sobre la vida de neonatos que ya tienen corazón, sangre y ADN». Asimismo, asegura que un aborto es «una intervención violenta. No se trata de falta de natalidad, sino de que están eliminando vidas. Parece que quieren que haya más abortos».
Al hilo, afirma que desde el Refugio Provida creen que lo que hace Pedro Sánchez es «un abuso y una campaña de humo para proteger sus propios escándalos». Además, subraya que la mayoría de los abortos «no tienen una causa fuerte; simplemente, se decide terminar con la vida de un hijo. Esto deja heridas profundas en las mujeres y en las familias», concluye.