Amazon y Google ganan la carrera del hogar inteligente, el resto solo pone música

Alexa, Siri o Google. Desde hace tiempo invocar esos tres nombres es algo habitual en muchos móviles, relojes y, por supuesto, en hogares. Los asistentes de voz nos daban ciertas facilidades porque ponían música, nos leían la agenda del día o nos hacían un resumen de noticias a base de aquellos contenidos virales, poca actualidad, mucho entretenimiento.

Pero la inteligencia artificial (IA) lo ha cambiado todo también en estos dispositivos inteligentes de audio, pero también de vídeo. Incluso van más allá con cámaras, timbres, altavoces, detectores de humo, streaming, redes wifi... el famoso ecosistema elevado a la máxima potencia que hace imposible subir tus fotos a Google y querer verlas en un Echo Show de Amazon.

El mercado de los ecosistemas para el hogar inteligente sigue evolucionando, y en 2025 Google y Amazon refuerzan su posición con una oferta más amplia y diversa de dispositivos y servicios que la de Apple. Mientras la compañía de Cupertino mantiene su estrategia en torno a HomePod, Apple TV 4K y la app Casa, sus competidores han acelerado con nuevas generaciones de altavoces, pantallas, cámaras, termostatos y sistemas de red, todos integrados bajo plataformas más completas.

Google: de Nest a Gemini

El ecosistema de Google ha crecido más allá de la línea Nest con la introducción de Gemini for Home, que unifica el control de altavoces, pantallas, cámaras, timbres, termostatos y televisores. Los nuevos altavoces Google Home Speaker y los Nest Hub están diseñados para interactuar de forma natural con Gemini, mientras que la gama renovada de Nest Cams y Doorbell ofrece mejor resolución y alertas más inteligentes.

Además, Chromecast y Google TV funcionan como hubs capaces de controlar dispositivos con baja latencia, y la app Google Home permite configurar rutinas y automatizaciones que combinan productos propios y de terceros.

Amazon, Alexa+ y el poder de la integración

Por su parte, Amazon ha redoblado la apuesta con Alexa+, disponible en la nueva familia Echo (Dot Max, Echo Studio, Echo Show 8 y 11). Estos dispositivos incluyen mejoras de audio, cámaras y procesamiento local para conversaciones más naturales. El Echo Hub, un panel de control mural, centraliza luces, clima, cámaras y otros dispositivos compatibles con Zigbee, Thread, Matter y Bluetooth.

La integración con Ring y Blink convierte al ecosistema en una propuesta interesante para la seguridad en el hogar, mientras que el Amazon Smart Thermostat aprovecha su conexión Alexa para ajustar automáticamente la temperatura. Además, los routers eero y los Echo amplían la conectividad y el control local.

Apple

Apple mantiene una propuesta más limitada y sigue sin dar un paso adelante en un dispositivo con pantalla para el hogar. Su ecosistema se basa en la app Casa y en los hubs HomePod, HomePod mini y Apple TV 4K, que actúan como centrales de accesorios para controlar dispositivos compatibles. Es cierto que la experiencia destaca por la privacidad y la integración con iOS, pero su alcance de hardware es menor ya que no cuenta con cámaras propias, pantallas inteligentes ni termostatos, lo que limita su oferta frente a Google y Amazon.

Aunque Apple sigue confiando en la estabilidad de su ecosistema y en su base de usuarios fieles, que el resto de marcas presenten tantos productos y los hagan tan accesibles para los clientes provoca que la experiencia de uso ponga en peligro su futuro. Es cierto que cuando Apple pone un producto en el mercado, el trabajo que hay detrás y la calidad del producto hará el resto, pero el tiempo corre en contra de los de Cupertino.

Google y Amazon están aprovechando su mayor catálogo y su integración con la seguridad, la conectividad y la inteligencia artificial. Apple mantiene su apuesta por la simplicidad y la privacidad, aunque con un abanico más limitado de opciones para el usuario. La inteligencia artificial ha propuesto dispositivos mucho más inteligentes que ya no solo ponen música.