Concepto de red neuronal
Ciencia
Una técnica canaria que estudia el universo consigue «escuchar» a nuestro cerebro
El proyecto 'Cosmic Brain' tiene el objetivo a largo plazo de comprender el envejecimiento cerebral
Un equipo multidisciplinar formado por profesionales de la astrofísica, la neurociencia, la ingeniería y la música ha presentado una técnica de cosmología que permite «escuchar» la estructura del cerebro humano.
Publicado en Nature Scientific Reports, el estudio presenta la primera sonificación de orden superior aplicada a datos de resonancia magnética estructural (MRI). Así, consiste en transformar información tridimensional del cerebro en sonido, teniendo en cuenta las relaciones espaciales y la estructura compleja de los datos.
De este modo, según explican en una nota desde el Instituto de Astrofísica de Canarias, se utilizan herramientas matemáticas desarrolladas originalmente para estudiar la estructura a gran escala del Universo, lo que permite percibir patrones ocultos a través del oído.
El trabajo surge del proyecto Cosmic Brain, dirigido por Francisco-Shu Kitaura, investigador del IAC y de la Universidad de La Laguna, que adapta las técnicas de análisis cosmológico a la neuroimagen con el objetivo a largo plazo de comprender el envejecimiento cerebral y, potencialmente, apoyar la detección precoz de enfermedades neurodegenerativas.
En el núcleo de esta innovación, detalla el IAC, está el uso de herramientas matemáticas avanzadas aplicadas a imágenes de resonancia magnética del cerebro. De hecho, en cosmología, estas técnicas se emplean para analizar cómo las galaxias se organizan y se agrupan formando estructuras complejas en el Universo. Sin embargo, ahora, ese mismo enfoque se traslada al estudio del cerebro humano, permitiendo detectar y describir con mayor detalle la riqueza y complejidad de su arquitectura interna.
«El resultado demuestra que las complejas formas tridimensionales del cerebro pueden convertirse en patrones audibles sin perder apenas información relevante», explica Kitaura.
Más allá de las aplicaciones de investigación, los autores destacan que la sonificación ofrece nuevas vías de accesibilidad, ya que permite a los científicos y médicos con discapacidad visual percibir datos multidimensionales complejos a través del sonido. Las sutiles variaciones estructurales en las imágenes cerebrales, a menudo difíciles de distinguir visualmente, pueden identificarse mediante señales auditivas.