Ainhoa Arteta, en Cuarto Milenio
Televisión
Ainhoa Arteta revela a Iker Jiménez su experiencia cercana a la muerte: «Sé que no morimos, el alma es eterna»
La cantante visitó Cuarto Milenio, el programa en el que relató lo cerca que estuvo de morir por culpa de una bacteria
La cantante Ainhoa Arteta visitó el programa presentado por Iker Jiménez Cuarto Milenio, donde compartió su experiencia personal reveladora relacionada con la muerte.
La artista explicaba durante el programa lo mucho que le ha costado hablar sobre esta situación porque no se veía con las fuerzas suficientes como para contarlo: «Me ocurrió en un estado en el que estaba prácticamente muerta y creo que, si puedo ser un vehículo para que le sirva a alguien, perfecto, y el que no se lo quiera creer no pasa nada».
Arteta comentaba que estaba en medio de un viaje en tren cuando comenzó a sentirse mal y decidió parar en un ambulatorio. Tras una exploración, decidieron operarla debido a unas piedras en la uretra, pero cogió una bacteria que desencadenó en una septicemia, por lo que tuvieron que trasladarla en helicóptero al hospital más cercano.
«Llegué a la UCI y lo único que recuerdo fue que dijeron 'hay que entubarla' (...) Estaba tumbada con los ojos abiertos, oía las cosas, pero no podía hacer absolutamente nada y nunca me olvidaré cómo este chico al que había agarrado estaba llorando en una silla», explicaba la cantante.
«Me dieron la penicilina y empezó a funcionar, eso fue el día 26 que fue cuando yo volví a la vida. Pero yo cuando volví estaba como feliz. Recuerdo que había estado en un lugar donde el silencio era absoluto, no se oía nada y estaba suspendida, yo decía que era un sitio oscuro, pero con muchas luces, como si estuviera suspendida en la galaxia'', explicaba la artista.
Además, comentaba que en ese silencio se sentía feliz, no sentía dolor: ''Veía a mis hijos y a la gente que me quería en distintos lugares y todos llorando, pero yo les decía que estaba muy bien'', aunque también vivió un suceso extraño, al parecer, la cantante vio cómo surgía lava de la que salían algo parecido a unos humanoides.
«La sensación era de estar en otra dimensión. La última imagen que tengo es la de mi madre y mi tía, yo estaba en cruz, y me desperté así. Mi madre era como un aura, reconocí que me agarraba la mano y me sonreía como diciéndome 'está todo bien''.
Además, admitía que se enfadó cuando volvió de ese silencioso lugar: '«Yo decía: 'con lo bien que estaba yo, por qué tengo que estar aquí'».
Tras este suceso, la cantante quiso dar durante el programa un mensaje a los espectadores: «Sé que no morimos (...) El alma es eterna, pero no os puedo decir dónde va».