
Fernando Alonso, durante el GP de Canadá
Los motivos de la indignación de Fernando Alonso con la FIA
La mala relación entre el asturiano y los comisarios de la FIA viene de lejos y visto lo visto parece que no va a tener solución tras lo sucedido en Canadá, donde tres pilotos tuvieron que ser sancionados
El gurú de la Fórmula 1 revela qué es lo que está fallando en Aston Martin
La relación entre Fernando Alonso y la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) nunca ha sido buena y cada año que pasa el piloto asturiano ve como los comisarios aplican el reglamento de una manera un tanto subjetiva con el único objetivo de perjudicarle.
Eso es una realidad. Y el último de muchos episodios se produjo este pasado fin de semana en el GP de Canadá, donde hasta tres pilotos adelantaron con el safety car en pista y no fueron sancionados cuando el reglamento dice que está expresamente prohibido ganar posiciones cuando el coche entra en pista antes de que se vuelva a la normalidad tras un accidente. «Espero que no sea como esos días en los que te dicen que a la próxima se cumple y no pasa nada. Si adelantas con bandera amarilla y el volante lleno de avisos del coche de seguridad, tendría que existir alguna penalización».
El asturiano tiene mucha razón en lo que dice. No acaba de entender por qué la FIA aplica distintos criterios con según qué pilotos y mucho menos el poco respeto que le tienen los comisarios a todo un bicampeón del mundo de F1. Lo sucedido en Canadá es una pequeña parte de la cantidad de veces que le han perjudicado.
El caso más extremo se produjo en el GP de Australia del año pasado. En esa carrera, la FIA sancionó al ovetense con 20 segundos y dos puntos en el carnet por una acción en la que ni tocó el freno ni hubo contacto con Russell, como sí hicieron creer a los comisarios, y acabó recibiendo la sanción más grave en 10 años, lo que molestó sobremanera a Alonso y dejó clara la animadversión por parte de la FIA hacia el asturiano.Alonso está indignado con la FIA y lo único que pretende es que los comisarios sean justos con las decisiones que se toman durante las carreras o las sesiones de clasificación. El asturiano piensa que los responsables deben de ser algo más ecuánimes, que el reglamento sea para todos igual y que no puede volver a pasar lo que sucedió en Montreal que dejó sin sanción a Leclerc, Piastri y Antonelli, que incumplieron las normas y no fueron sancionados.
En definitiva, el piloto de Aston Martin cree que es uno de los más ejemplares del paddock en lo que a juego limpio se refiere y no logra entender el motivo por el cual otros pilotos, como puede ser el caso de Esteban Ocon, Liam Lawson, Kevin Magnussen o Max Verstappen, no reciben el mismo trato sancionatorio que Alonso cuando son mucho más antideportivos que él. Lo del ovetense y la FIA es una guerra sin solución que ya viene de años atrás.