Kylian Mbappé, en una imagen de archivo
Mbappé deja entrever que heredará el dorsal '10' de Modric esta temporada con un mensaje en sus redes
Un escueto mensaje en X («10») confirma el regreso a un número lleno de historia y liderazgo; el francés hereda un dorsal símbolo de jerarquía deportiva y estrategia de marketing
En la noche del martes, Kylian Mbappé despejó las especulaciones que rodeaban al Real Madrid con un mensaje tan breve como impactante en su cuenta de X (antes Twitter): «10». Solo ese dígito, publicado alrededor de las 22:52 hora local, fue suficiente para confirmar lo que se esperaba: el delantero francés lucirá esta temporada el dorsal número 10 en el club blanco.
Este cambio de numeración marca la transición de Mbappé del mítico dorsal 9, que vistió durante la pasada campaña, al icónico 10 —vacante tras la marcha de Luka Modric a mediados de julio rumbo al AC Milan. El propio Modric liberó la camiseta que había llevado desde 2017, cerrando una etapa dorada y dejando un legado de 13 temporadas, 597 partidos oficiales, 28 títulos y un Balón de Oro.
En el Real Madrid, el número 10 no es un simple dorsal: representa creatividad, liderazgo y el talento más excepcional. Desde Luis Figo a James Rodríguez, pasando por Mesut Özil o Robinho, quienes lo han vestido han encarnado una influencia determinante en el equipo. Para Mbappé, adoptarlo constituye una declaración de intenciones tanto en lo deportivo como en lo táctico.
El delantero galo reafirma así su rol como figura central: ya lo lleva en la selección, donde ejerce de capitán y liderazgo en el camino hacia el Mundial 2026. Además, el cambio impulsa la marca del club: según medios, el 10 de Mbappé tendrá un precio de lanzamiento de 125 €, alcanzando 175 € en su versión profesional, y se anticipa que genere un éxito de ventas similar o mayor al de su camiseta anterior
Este relevo no solo renueva la imagen deportiva del equipo, sino que también marca una época de transición en la plantilla. Tras la salida de veteranos como Modric, Lucas Vázquez o el posible estancamiento de Rodrygo, el club asume que el liderazgo recaerá en figuras como Mbappé y, posiblemente, con el respaldo de fichajes jóvenes y prometedores.
Pedja Mijatovic, exjugador y director deportivo, advirtió del desafío que representa reemplazar a Modric y Kroos, y aconsejó paciencia con los relevo generacionales. En este contexto, el dorsal 10 se convierte en el foco de la identidad del equipo: creatividad, conducción, visión de juego… y, por supuesto, liderazgo absoluto.
En resumen, el símbolo está claro: Mbappé asume ahora el número 10, un emblema cargado de historia y expectativas. En el césped, su rendimiento individual —31 goles en LaLiga, Pichichi y Bota de Oro— ya demostró su valor, pero ahora, con el número 10, la presión y el compromiso aumentan. Para el aficionado merengue, este fichaje de dorsal no es solo un trámite: es el inicio de una nueva era, con Mbappé en el epicentro del proyecto deportivo y comercial del club.