
Ángela de Miguel, candidata a la presidencia de Cepyme.
Entrevista
Ángela de Miguel: «La silla de Cepyme estaba vacía en la negociación sobre el absentismo»
La candidata a las elecciones de la patronal de las pymes reclama una patronal transparente, democrática y útil para las empresas que más sufren
Ángela de Miguel se presenta a la presidencia de Cepyme con el apoyo de la CEOE en un movimiento que ha desatado la mayor fractura interna dentro de la patronal. Su candidatura no solo supone un desafío directo al actual presidente, Gerardo Cuerva, sino que pone en juego el prestigio –y quizá el futuro en la gran patronal– del propio Antonio Garamendi.
En esta entrevista, De Miguel defiende una Cepyme más fuerte, representativa y conectada con las verdaderas necesidades de las pymes, denuncia la falta de voz propia en el diálogo social y reclama una patronal transparente, democrática y útil para las empresas que más sufren.
–La situación en la patronal es complicada. ¿Cómo le sienta que la conozcan como «la candidata de Garamendi»?
–Espero que se me conozca como Ángela de Miguel. Creo que aquí lo importante es hablar del proyecto para Cepyme y, sobre todo, de las pymes. Nosotros defendemos una Cepyme integrada en un modelo de unidad con CEOE y ATA, pero con una voz propia y diferenciada, porque consideramos que la pyme española no la tiene actualmente. Queremos darle un espacio real, una voz fuerte, porque las pymes lo están pasando francamente mal y se sienten un tanto abandonadas. Nuestro objetivo es revertir esa situación.
–Mencionaba que quiere dar más voz a la pyme, pero los reproches de la CEOE hacia Gerardo Cuerva apuntan a que se ha excedido en sus declaraciones y actuaciones. ¿Está de acuerdo?
–Desconozco quién dice eso. Lo que puedo decir es que, si uno recorre España y pregunta, todo el mundo conoce a Antonio Garamendi, a la CEOE, a Lorenzo Amor y a ATA. Nosotros queremos que ocurra lo mismo con Cepyme. Ese es el objetivo real. El discurso sobre la pyme es común en las más de 4.000 organizaciones que formamos parte de la CEOE. No he escuchado ninguna divergencia relevante en Cepyme. La realidad de las pymes es muy clara, y es nuestra responsabilidad denunciarla. No hay mucho margen para interpretaciones. Queremos que Cepyme tenga más presencia y que se conozca la dramática situación que viven muchas pymes en España.
Hoy hay menos microempresas que en años anteriores y están contratando menos
–¿Cuáles son sus principales propuestas de cara a las elecciones del 20 de mayo?
–Tenemos dos líneas fundamentales. La primera es visibilizar la realidad de la pyme los 365 días del año. Hoy hay menos microempresas que en años anteriores y además están contratando menos, lo cual indica que no están creciendo. Eso es gravísimo. Queremos estar en todas las mesas de negociación siendo propositivos, planteando políticas públicas concretas tanto en España como en Europa. Debemos tener más peso en las organizaciones de pymes europeas, porque muchas decisiones económicas se toman en Bruselas y allí hay que estar, defendiendo nuestras necesidades.
La segunda línea es trabajar directamente con las pymes, desarrollando proyectos que devuelvan ilusión al empresario. Aunque estamos en una década crítica, el empresario sigue siendo optimista. Queremos respaldar ese optimismo con programas de impulso a la cultura emprendedora, mejora de la imagen del empresario, internacionalización, acceso a financiación, formación, innovación digital… Todo orientado a mejorar la productividad con acciones concretas.
–Habló de mayor presencia en la negociación. ¿Cree que la actual dirección ha estado ausente en el diálogo social?
R: Pensamos que se puede estar con mucha más presencia. Por ejemplo, en la apertura de la negociación sobre el absentismo, la silla de Cepyme estaba vacía. Y eso es preocupante, porque uno de los grandes problemas que afronta la empresa española hoy es la gestión de las bajas por contingencias comunes. No podemos dejar esos espacios sin representación.
Las pymes deben decidir quién las representa
–¿Puede adelantarnos algo sobre su equipo?
–Queremos una organización de abajo hacia arriba. No se trata de formar un equipo de confianza del presidente, sino uno que refleje la representatividad real de las pymes, con la mayor diversidad territorial y sectorial posible. Serán las propias organizaciones quienes designen a sus representantes en el comité ejecutivo. Cepyme debe representar a quienes la integran, no a personas afines al liderazgo.
Serán las organizaciones quienes elijan a sus representantes. La presidenta no va a designarlos. Cada organización tiene sus normas y tiempos, y nosotros los respetamos. Las pymes deben decidir quién las representa.
–Algunas patronales regionales pidieron hace unas semanas que se investigara unas supuestas irregularidades por su parte. ¿Cuál es su valoración?
–No vamos a entrar en ese tipo de cuestiones. Nos parece una guerra sucia. Vemos que muchas de las personas que apoyan nuestra candidatura están siendo objeto de campañas de desprestigio. Esto es algo demasiado serio: hablamos del tejido empresarial de España. Nuestro foco está en las pymes, no en polémicas personales.
–¿Se siente atacada?
–Cómo me sienta personalmente es irrelevante. Esto no va de personas, sino de un proyecto para las pymes. Si me afecta algo, me lo gestionaré en lo personal. El debate debe estar centrado en lo importante: las pymes y su futuro.
Lo importante es que se respeten las normas. No se puede cambiar una regla según convenga
–¿Cree que le ha beneficiado a su candidatura el hecho de que finalmente se haya descartado el cambio en el sistema de voto?
–Creo que quien gana es la organización. Cepyme representa algo crucial como es la defensa de la pyme española. Lo importante es que se respeten las normas. No se puede cambiar una regla según convenga. Las normas están para cumplirse. Y si hay que modificarlas, debe hacerse con consenso, escuchando a todos los sectores y territorios. La seguridad jurídica es clave, y debemos dar ejemplo.
–Hablando de cifras, las pymes representan el 99% del tejido empresarial español, y un 93% tienen menos de 10 empleados. Sin embargo, Cepyme cuenta con un presupuesto exiguo, apenas 2 millones de euros, en su mayoría aportados por CEOE. ¿Se puede defender con eficacia a las pymes con esos recursos?
–Cepyme es una confederación que integra 144 organizaciones, cada una con sus propios equipos y presupuestos. No está sola. Es cierto que queremos ampliar el presupuesto de la confederación, y creemos que es posible hacerlo organizando actividades y generando ingresos adicionales. Muchas organizaciones ya lo hacen. Aumentar los recursos nos permitirá tener más impacto.
Además, debemos visualizar la fuerza colectiva de todas las organizaciones que forman Cepyme. Aprovechando ese talento y esa estructura, podemos hacer mucho más. Es una cuestión de estrategia, no solo de dinero.
No hay ninguna organización empresarial en España que se acerque, ni de lejos, al nivel de representación de Cepyme
–La ministra de Trabajo ha incluido a Conpymes en el diálogo social. ¿Existe el riesgo de que Cepyme desaparezca?
–Cepyme no va a desaparecer. Las normas que regulan el diálogo social –desde la OIT hasta las directrices europeas– son muy claras: participan las organizaciones más representativas.
Actualmente no hay ninguna organización empresarial en España que se acerque, ni de lejos, al nivel de representación de Cepyme, que integra a cientos de miles de empresas a través de sus organizaciones territoriales y sectoriales. La libertad de asociación es un principio democrático. Las empresas eligen libremente con quién asociarse, y la inmensa mayoría lo hacen con entidades integradas en Cepyme. Mientras esto siga así, no hay motivo para preocuparse.
–¿Contempla la posibilidad de una candidatura única con Gerardo Cuerva?
–Estamos defendiendo un modelo concreto de Cepyme. Por supuesto que se puede hablar de todo, siempre que se trate del proyecto. A la pyme no le interesan los nombres, le importa qué vamos a hacer por ellas.
–Pero se está hablando de nombres. El presidente de la patronal andaluza dijo que se le había encargado mediar entre usted y Cuerva.
–Sí, lo he visto, pero me pregunto quién le ha encargado eso. En todo caso, no veo ningún problema en que haya dos candidaturas. Soy una firme defensora de la democracia, tengo formación específica en gobernanza y políticas públicas. Siempre que haya juego limpio y se ponga por delante el interés de la organización, tener dos visiones puede ser muy positivo. Nos obliga a repensar el modelo de Cepyme, a reflexionar sobre lo que queremos para el futuro. Y eso es un ejercicio saludable.