Félix Bolaños ha sido protagonista en varias de las controversias del actual Gobierno
El torrente de errores que acumula Bolaños como ministro
La Comisión Europea tuvo que salir a desmentir al ministro de Justicia, Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, después de que –tras una reunión con el comisario de Justicia de la Unión, Didier Reynders– el miembro del Ejecutivo español aseverara que en Europa hay «cero preocupación» por la Ley Amnistía española. «El análisis sigue en marcha, por tanto, en ese sentido el comisario no ha dicho por ahora que la ley de amnistía no plantee preocupaciones», explicó el portavoz de Reynders, Christian Wigand.
A pesar de que el titular de Justicia y Presidencia se reafirmó en sus palabras –y de hecho culpó al «globo de la derecha y la ultraderecha» por «intentar decir que Europa está preocupadísima»– lo cierto es que Bolaños acumula una serie de polémicas que le han valido las críticas de diversas personalidades, entidades y organizaciones.
Sus declaraciones sobre el Supremo
El pasado jueves 30 de noviembre el Gobierno de Pedro Sánchez recibió dos importantes varapalos judiciales. El Tribunal Supremo revocó el nombramiento de Magdalena Valeria como presidenta del Consejo de Estado, y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) –en una resolución no vinculante– dictaminó que el actual fiscal general, Álvaro García Ortiz, es «inidóneo» para encabezar el Ministerio Público.
Así las cosas, tras conocer estas dos decisiones, el recientemente nombrado titular de Justicia aseveró que «respetamos la sentencia del Tribunal Supremo, pero no la compartimos, porque creemos que no se puede abrir la puerta a que una entidad privada pueda cuestionar decisiones que son exclusivamente competencia del Gobierno de España, como es nombrar a la presidencia del Consejo de Estado».
Estas palabras generaron grandes críticas, ya que el ministro parecía dar a entender que el Tribunal Supremo es una entidad privada, en vez de un órgano judicial, y tampoco concretó a que compañías se refería. El nuevo portavoz adjunto del PP en el Congreso, Rafael Hernando, comentó que «que ‘minisanchez’ Bolaños diga que el Tribunal Supremo de España es una entidad privada es una de las mayores barbaridades jurídicas que se han depuesto jamás por parte de un ministro de Justicia. Una gran melonada pronunciada por un ignorante».
Por su parte, la magistrada Teresa Puchol escribió en sus redes sociales: «El Sr. Bolaños: 'no se puede abrir la puerta a que una entidad privada pueda cuestionar decisiones que son competencia del Gobierno de España'. Sr. Ministro de Justicia, de Presidencia y de Relaciones con las Cortes: que esa puerta ya estaba abierta», subrayó la magistrada en referencia a que cualquier empresa ya podía reprobar las resoluciones antes de la sentencia contraria al Ejecutivo de Sánchez.
El fracaso de la moción de censura en Murcia
En marzo de 2021, el PSOE decidió presentar mociones de censura en Ayuntamientos y regiones de España para que, con el apoyo de un ya mermado Ciudadanos, los socialistas pudieran llegar al poder en las distintas localidades. Uno de los principales artífices de esta idea, y de las consecuentes negociaciones, fue Bolaños, que todavía no era ministro pero que ejercía como hombre fuerte del ministerio de Presidencia.
Sin embargo, la estrategia no salió como Bolaños esperaba ya que cuando se anunció la moción de censura en la Región de Murcia, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, convocó elecciones anticipadas ante el riesgo de que Ciudadanos apoyara un Ejecutivo liderado por los socialistas. Tras ello, Ayuso cosechó prácticamente una mayoría absoluta, y, además, la moción en la Asamblea murciana fracasó.
El protocolo con Ayuso
En la celebración del Dos de Mayo de este año –día de la Comunidad de Madrid– el entonces ministro de Presidencia acudió al evento sin haber sido invitado. Además, Bolaños intentó colarse en la tribuna de autoridades donde se celebró el acto, aunque la responsable de protocolo del equipo de Ayuso se lo acabó impidiendo. «Sobre la marcha, bajo ningún concepto. Estamos cumpliendo la normativa», le espetó al ministro.
No obstante, Bolaños aprovechó el acto para acusar al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, de «tener intereses ocultos» por miembros del CGPJ. Asimismo, desde esa celebración la relación del ministro con la líder del Ejecutivo madrileño se ha enraizado cada días más y ha estado cargada de reproches y críticas.
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