Las claves del crecimiento de Vox en las encuestas: trasvase del PP y primera opción entre los jóvenes

Decía Santiago Abascal hace unos días ante las cámaras de Telecinco que es muy escéptico con las encuestas. En las filas del partido no acostumbran a pronunciarse al respecto, ni cuando el viento sopla en contra ni cuando, como en este caso, sopla a su favor; así también lo venía a señalar Pepa Millán, la portavoz parlamentaria, en una entrevista reciente en El Debate, si bien defendía que el tiempo parece estar dándoles la razón en lo que denunciaban a su llegada al panorama político.

Lo cierto es que en los sondeos de los últimos meses, se ha consolidado la tendencia al alza de Vox, que actualmente es el partido que más crece en intención de voto. El último barómetro de encuestas de Electrocracia realizado a partir de los sondeos más recientes, que publicó este periódico el viernes, recoge que, si hubiera hoy elecciones generales, la formación de Abascal obtendría entre 54 y 56 escaños, el 16,42 %, con más de cuatro millones de votos, rompiendo su techo electoral (52 escaños).

El socio y director de Análisis de Target Point, José Miguel Silva, explica en conversación con El Debate que Vox ha estado bastante estable en las encuestas desde las últimas elecciones generales; no obstante, ese repunte significativo se ha notado especialmente antes del verano, cuando en el mes de junio saltó el demoledor informe de la UCO que terminó provocando la dimisión y el ingreso en prisión del exsecretario de Organización del PSOE Santos Cerdán. Según apunta el sociólogo, esto espoleó más al partido de Abascal que al PP, cuyo crecimiento se estancó en ese momento en los sondeos y en los meses de verano ha bajado.

¿De dónde viene ese crecimiento? Sobre todo del trasvase de votos que se produce desde la formación de Alberto Núñez Feijóo. En concreto, tal como explica Silva, los populares han perdido de julio a septiembre más de 700.000 votos, y al menos medio millón se van a Vox. Si bien otra parte de esos votos, aunque una parte mucho más pequeña, va al PSOE, y otra a la abstención, pero el grueso de ese trasvase se produce hacia la formación de Abascal. Como contó El Debate, en la última encuesta elaborada por Target Point, el 16,6 % de los encuestados que decían haber votado al PP en 2023 ahora elegirían a Vox. Y aquí también es relevante destacar que este cuenta con una fidelidad de voto muy alta, a diferencia del PP y del PSOE.

Pero no solo capta votos del partido de Feijóo, o de la abstención; también es clave en el crecimiento de Vox el apoyo del voto joven. Entre los que desde las últimas elecciones generales han cumplido la mayoría de edad y las personas que han obtenido en este tiempo la nacionalidad, mayoritariamente de Hispanoamérica, hay, según indica el director de Análisis de Target Point, más de un millón de nuevos votantes. Y actualmente con los datos encima de la mesa Vox es primera fuerza entre los jóvenes de 18 a 29 años y también en la franja de entre 30 y 39 años; aunque, por el contrario, la intención de voto es muy baja entre las personas mayores de 70. En este caso, como en los mayores de 50, sigue habiendo preferencia por el PP y el PSOE.

Otro aspecto muy significativo es que desde antes de verano el partido de Abascal está experimentando un fuerte crecimiento entre la población que trabaja en profesiones manuales, entre la clase obrera, situándose por primera vez en primera posición en intención de voto, y también está fuerte entre la población en situación de desempleo. Es un sector en el que «está penetrando de forma importante» y tiene que verse si esa tendencia se consolida en los próximos meses.

Uno de los ejes principales del discurso de Vox es la oposición total al Gobierno de Pedro Sánchez -al que califica de mafia- por su corrupción y por sus políticas. Una oposición que ha ejercido en los tribunales, personándose en todos los casos que rodean al Ejecutivo, al PSOE y al entorno de Sánchez; en las instituciones, votando 'no' a todas las medidas que impulsan los socialistas, o con dos mociones de censura e iniciativas que van en la dirección contraria a la que estos plantean; y también en las calles, impulsando o apoyando movilizaciones.

E igualmente marca también su discurso el choque con el PP, al que iguala al PSOE erigiéndose como la alternativa al bipartidismo y a sus políticas. De hecho, el propio Abascal ha hablado en alguna ocasión del «PSOE de Feijóo», al que ha acusado de «estafar» a los españoles. Creen desde las filas de Vox que llegado el momento populares y socialistas pactarán. Aluden a la «gran coalición» que recriminan al PP en Bruselas: «La mayoría entre PP, Vox y fuerzas patrióticas y conservadores existe en el Parlamento Europeo y, sin embargo, el PP no la pone en marcha, ha pactado con los socialistas. Feijóo y el PP van a terminar pactando aquí con el PSOE después de las próximas elecciones», sostuvo Abascal hace unos días en su entrevista en El programa de Ana Rosa. Cabe señalar que su salida de los gobiernos que compartían con los populares en 2024 fue un factor que les impulsó en los sondeos en los meses sucesivos; y desde ese momento, excepto en el centenar de municipios donde gobiernan juntos, la ruptura con Génova ha sido total.

Un elemento que Vox ha abanderado desde que apareció en el panorama político pero especialmente en los últimos años es la cuestión migratoria, reforzando su postura de luchar contra la inmigración ilegal, controlar las fronteras y endurecer la legislación en materia migratoria. Como también reflejan los análisis de Target Point, en estos momentos la inmigración es una de las principales preocupaciones que tienen los españoles, junto a problemas como el acceso a la vivienda, la okupación y la percepción del aumento de la delincuencia y la inseguridad o el coste de la vida. Pero es la cuestión migratoria uno de los que más ha subido en los últimos tiempos.

Precisamente este verano este tema ha estado en el foco por un lado con sucesos como los altercados de Torre Pacheco o las recientes violaciones en Alcalá de Henares o en Hortaleza a manos de inmigrantes llegados ilegalmente; por otro lado, con el reparto de menores no acompañados llegados a Canarias y a Ceuta entre el resto de comunidades. Pero también Vox ha puesto en el debate, como sus socios europeos, la cuestión de la creciente islamización. «Nunca aceptaremos el califato de Bruselas. Nunca es nunca», afirmó Santiago Abascal en el evento Viva 25 que celebró a mediados de este mes.