Así encajó el juez Peinado el 'plantón' de Begoña a su última citación judicial

El pasado 27 de septiembre, la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, no acudió a la citación que el juez Juan Carlos Peinado le había realizado para informarle de que, en caso de que sea procesada por malversación, sería enjuiciada por un jurado popular.

Este plantón generó en su momento mucho debate, pues algunos lo interpretaron como una provocación al juez Peinado, sobre todo después de aceptarse las medidas de seguridad excepcionales para Begoña Gómez. Sin embargo, el magistrado se limitó a dejar constancia de su ausencia, tal y como se observa en la grabación de la citación, a la que ha tenido acceso El Debate. «Siendo la hora señalada, y ante la incomparecencia de los investigados, los cuales se encuentran debidamente citados en forma, se va a proceder al inicio de la comparecencia...».

A pesar de que el Decanato de los Juzgados de Plaza de Castilla había autorizado, como otras veces, que Begoña Gómez compareciera bajo estrictas medidas de seguridad, tampoco acudieron su asesora en Moncloa, ni el actual delegado del Gobierno en Madrid.

En el escrito remitido a los tres imputados se indicaba: «Se convoca la comparecencia prevista en el artículo 25 de la Ley Orgánica del Tribunal Del Jurado, señalándose para su celebración el próximo día 27 de septiembre de 2025, a las 18,00 horas, debiendo ser citadas las partes personadas a través de su representación procesal, y los investigados, personalmente, a través de la Unidad Orgánica de Policía Judicial adscrita a estos Juzgados».

Aquel 27 de septiembre, que era sábado y coincidía además con el cumpleaños del juez Peinado, el abogado de Gómez, Antonio Camacho, esgrimió una circular de la Fiscalía del año 1995 para justificar la ausencia de su defendida.

«En cuanto al imputado, porque, como ya se ha visto, el traslado de la imputación ha debido hacerse en un momento anterior. En la comparecencia sólo se van a concretar los términos de tal imputación y siempre ante la presencia de su letrado. La presencia del imputado no es indispensable. En la comparecencia, como se verá enseguida, no se practican diligencias de instrucción y, por tanto, tampoco la declaración del imputado», reza la circular, n.º 4/1995.