Sánchez ensalza el protocolo antiacoso sexual del PSOE en plenos escándalos dentro del partido

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha arropado este domingo en Extremadura a Miguel Ángel Gallardo, candidato del PSOE a la presidencia de la comunidad, en un acto marcado por la defensa de las políticas feministas del partido en pleno contexto de escándalos de acoso sexual que han golpeado a la organización en las últimas semanas.

Sánchez ha situado el debate político en términos de elección moral y de futuro. Ha advertido de que «la derecha ha querido imponer un futuro que no ha sido un proyecto, sino una involución» y ha llamado a la movilización frente a lo que ha descrito como una «amenaza al Estado del bienestar».

«Entre la involución y una papeleta que ha representado el progreso, todos tenemos que ir a votar a Miguel Ángel Gallardo, porque cada voto cuenta», ha subrayado, mientras ha ironizado con el ruido de la oposición. «Mira que han chillado y han gritado, pero también mira cómo han desajustado el Estado del bienestar cuando han gobernado».

El jefe del Ejecutivo ha apelado a la memoria histórica del socialismo para reforzar el mensaje de resistencia. «¿Cuándo lo hemos tenido fácil los socialistas?», se ha preguntado, recordando que esa misma semana se han conmemorado los cien años de la muerte de Pablo Iglesias.

Sánchez ha reivindicado la identidad del PSOE más allá de las siglas. «No hemos sido herederos de unas letras, hemos sido herederos de una idea y de una obligación», ha afirmado, definiendo esa idea como «nuestra pasión por la igualdad». Una igualdad que, según ha dicho, «se ha transformado en dignidad salarial, en acceso a la vivienda y en pensiones dignas».

Asimismo, ha defendido la acción del Ejecutivo «cuando me han preguntado si he estado cansado, he respondido que este Gobierno ha sido incansable cuando se ha tratado de mejorar la vida de la gente».

El presidente ha enlazado esa trayectoria con la acción de gobierno y el carácter del partido. «Las reformas han venido del PSOE», ha afirmado, para añadir que «el socialista no ha sido el que nunca ha caído, ha sido el que siempre se ha levantado». A su juicio, por eso «la gente progresista, cuando ha mirado a un partido, ha mirado al PSOE».

Criticas al presidente de la Conferencia Episcopal

Sánchez ha cargado contra quienes cuestionan la legitimidad del Ejecutivo. Ha aludido a unas recientes declaraciones del presidente de la Conferencia Episcopal y ha replicado que «España ha tenido una cuarta opción, respetar la elección electoral aunque no te haya gustado». «El tiempo en el que los obispos interferían en la política ha acabado en este país. Aunque también le invito al señor Argüello que se puede presentar a las elecciones con la asociación ultraderechista, Abogados Cristianos».

Sánchez ha defendido que «a los españoles les ha rentado este Gobierno», enumerando medidas como la subida de las pensiones, las becas para jóvenes, los permisos de maternidad y la protección a las víctimas de violencia de género.

«Claro que ha rentado un Gobierno progresista», ha remachado, antes de ironizar sobre el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. «No he entendido por qué Feijóo pide elecciones todos los años si pudo ser presidente y no ha querido».

Sánchez ha reivindicado su ambición política frente a la del líder de la oposición. «Yo sí he querido ser presidente del Gobierno para subir las pensiones, el salario mínimo, para proteger a las mujeres y para defender la legalidad internacional, en Ucrania y en Gaza», ha afirmado.

También ha defendido la gestión de las crisis recientes: «Se ha dicho que hemos tenido mala suerte al gobernar con una pandemia, volcanes y una crisis energética, pero menos mal que hemos gobernado nosotros, cuando llegó la pandemia ha habido ERTES y no ERES».

Defensa del feminismo

Uno de los ejes centrales del discurso ha sido el feminismo tras los casos de acoso sexual dentro del partido. Sánchez ha recordado los acuerdos del 40º Congreso del PSOE. «Hemos dicho que además de defender derechos, hemos incorporado dos conceptos: ser un partido ecologista y ser un partido feminista».

Ha defendido la trayectoria socialista en este ámbito, señalando que «este partido ha hecho obligatorio por ley incorporar los derechos de las mujeres, ha aprobado leyes de igualdad, del aborto, contra la trata y ha defendido la abolición de la prostitución».

En referencia directa a los casos de acoso, ha recalcado que «el PSOE ha puesto un protocolo antiacoso y ha sido el primero en aplicarlo». Ha reconocido errores, pero ha marcado distancia con otros partidos. «Habremos cometido errores, como todos, pero siempre hemos actuado con contundencia y transparencia».

Y ha equiparado estas conductas a otras prácticas que, ha dicho, el PSOE no tolera. «La corrupción ha sido una traición al partido y siempre la hemos erradicado, no como en el PP, donde se han codeado con ella».