El PSOE borra a Zapatero de una campaña por primera vez desde 2021 y en plena polémica por su reunión secreta

El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero –que bautizó como «super Santos Cerdán» al exsecretario de Organización del PSOE imputado por corrupción en el Tribunal Supremo– no ha participado en ningún acto electoral de los socialistas en la campaña de las elecciones extremeñas, que comenzó el pasado 5 de diciembre y que termina este viernes.

El PSOE sí ha contado con el que fuera jefe del Ejecutivo en todas sus campañas electorales desde 2021, aunque en los comicios que se celebrarán el próximo 21 de diciembre ha optado por que no intervenga en ningún mitin. Esta decisión llega en medio de las exclusivas de El Debate que han revelado que Zapatero se reunió en un monte sin cobertura con uno de los detenidos en el caso Plus Ultra 72 horas antes de que lo arrestara la Policía Nacional. Igualmente, este periódico ha desvelado que la casa del expresidente del Gobierno en la localidad madrileña de Aravaca albergó cinco reuniones sobre las trasferencias de Plus Ultra a Venezuela que investigan los agentes.

El pasado 28 de noviembre, antes del inicio de la campaña electoral y de la publicación de estas informaciones, Zapatero se desplazó a un municipio extremeño para asistir a la entrega de los Premios Rafael Castilla, junto al portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Patxi López, y el secretario general del PSOE de Extremadura, Miguel Ángel Gallardo.

Durante ese acto, el expresidente del Gobierno defendió que se debe «culminar esta legislatura de grandes propósitos y objetivos» y calificó a Pedro Sánchez como «un presidente valiente, progresista, que ha llevado las mejores cotas económicas y sociales a España en su historia».

«Le apoyamos y le apoyaremos», reafirmó Rodríguez Zapatero, quien admitió que el Parlamento «ahora pesa más que antes pesaba» y que «hay que ganarse voto a voto», para concluir que «eso es la democracia».

En este sentido, señaló que «el Gobierno tiene que trabajar más, pero fijaros qué bien le va al país», y subrayó que España es el «país que mejor crece económicamente y más».

También lamentó que la derecha esté «obsesionada» con Pedro Sánchez, a quien considera «malo, malísimo», e ironizó señalando que esos partidos «son aplicados en descalificar, insultar, denigrar, denostar».

Por su parte, señaló que en la derecha «están obsesionados con Pedro Sánchez», mientras que antes era con él mismo, «y mucho antes con Felipe. Ahora ya no», ha ironizado. Por este motivo, aseveró que para esas críticas son «ni el sanchismo ni el zapaterismo», sino que «es al PSOE, su fuerza, sus compañeros y la historia de transformación de este país lo que no les gusta», ha dicho. «Que no nos chupamos el dedo», zanjó.