
Los espumosos, los rosados y la mezcla de ambos son las mejores opciones
Gastronomía
Cinco vinos para tomarse con un buen cubo de palomitas de maíz
Estamos acostumbrados a tomar unas deliciosas palomitas a la vez que disfrutamos de una buena película y si además lo unimos a un vino puede ser espectacular
La propuesta es atrevida para ofrecer la posibilidad de apostar por el vino con una de las formas más habituales de disfrutar de una película ya sea en casa o en el cine cómo es la de unir el séptimo arte a las palomitas.
Hoy, 19 de enero, se celebra el Día de la Palomitas de Maíz y casi siempre las acompañamos de algún refresco o cerveza en el que están presentes los carbónicos o burbujas. ¿Y por qué no disfrutar unas buenas palomitas junto a un vino?
Tengo que confesar que he preguntado a personas cercanas, Ramón Sánchez-Camacho, presidente de la Asociación de Sumilleres de Castilla-La Mancha, y lejanas del mundo del vino sobre esta apuesta y nadie se ha escandalizado. Es verdad que, en algunos casos, al contactar por las redes sociales, no he recibido respuesta. Otra vez será.
En esta selección de vinos para acompañar a las palomitas hay dos grandes destacados. Los espumosos, los rosados y la mezcla de ambos. Con precios muy asequibles que no conviertan el placer de las palomitas en la tortura del vino.Espumosos típicos y no tan típicos
Esencia Montes Norte Brut es un vino reconocido como Mejor Vino Espumoso en los Premios Selección Campo y Alma 2023. El Grupo Montes Norte elabora en Ciudad Real vinos, aceites y otros productos de alimentación. Este espumoso está dentro de la Indicación Geográfica Protegida Vinos de la Tierra de Castilla y destaca por tener un color bastante pálido con matices verdosos. Su paso por boca es muy fresco, afrutado, y sus pequeñas burbujas pueden hacer de la fusión con las palomitas algo muy agradable.
Entre los espumosos poco típicos por la variedad con la que han sido elaborados está el Robles Brut Nature 18 que se elabora Bodegas Robles con la uva Pedro Ximénez en la zona de Montilla-Moriles. Un espumoso elaborado por el método tradicional Champagnoise a partir de la vendimia y selección manual de la uva recogida de parcelas ecológicas. Tiene una burbuja muy persistente y afinada que puede resultar exquisita y que es fruto de su doble fermentación en botella durante 18 meses a partir de un ensamblaje con vinos generosos.
Los rosados pálidos o con más fuerza
Entre los vinos rosados es cierto que me cabe la duda de si un vino pálido y semidulce como es el Monastrell Rosado de Bodegas Castaño o bien uno con más fuerza e igual de original como el Rosado Homenaje de Bodegas Marco Real.
El primero, semidulce, es uno de los vinos que más éxito ha tenido a lo largo de este curso en dos de las sesiones del Aula Cultural del Vino que organizo en la Universidad CEU San Pablo, con el fin último de difundir la cultura del vino entre los jóvenes alumnos. Este vino se produce a través de un prensado directo, no macerado con hollejos, la piel de la uva, lo que provoca un color rosa pálido, limpio y brillante. La fermentación se interrumpe en su etapa final para mantener un mayor contenido de azúcar natural y hacer que se destaque frescura en boca, con un buen equilibrio entre su agradable acidez y dulzor natural.

Los vinos ideales para maridar palomitas
Con una intensidad mayor a partir de la variedad estrella en Navarra para la elaboración de rosados, la Garnacha, destaco el Homenaje Rosado. Sólo el nombre ya es llamativo y la etiqueta quizás más. Un vino que se labora por el método del sangrado para extraer el primer mosto de la uva por su propio peso, sin ningún prensado mecánico. Tiene un color rosa fresa intenso que se refleja en boca de una forma afrutada, sabrosa y fresca. Su golosidad puede ser el gran contraste que buscamos con el toque salado de las palomitas.
Para terminar esta breve selección. Un vino rosado y espumoso, esa mezcla de las dos partes. Corazón Spumante Rosado está elaborado por las Bodegas Andrés Iniesta en la reconocida Denominación de Origen Manchuela. Un vino elaborado con la variedad autóctona y representativa de la zona, la Bobal, que muestra en copa con un color pétalo de rosa pálido, burbuja fina y persistente. Al llevarlo a la boca encontramos un perfecto equilibrio entre la burbuja muy fina y las sensaciones de volumen y untuosidad fruto de una larga crianza sobre lías.
Son tan sólo cinco vinos y, obviamente, podrían ser muchos más. Las directrices principales para disfrutar de un vino con las palomitas son la burbuja fina de los espumosos, la acidez que provoque una gran limpieza de los sabores de la boca y en el caso de los semidulces, se añade la búsqueda de un gran contraste. Disfruta de la película.
Tiempo de Vinos (https://www.tiempodevinos.com)