La cantante Maú con su novio El Turco
La nueva vida de Malú muy enamorada y lejos de los focos
La artista está feliz, junto a su hija Lucía de 5 años, y El Turco, el técnico de producción que se ha convertido en su pareja
El verano de 2025 está resultando especialmente luminoso para Malú, no solo por el éxito de su gira A todo sí. 25 años de Aprendiz, sino también por la etapa personal que atraviesa. Tras años en los que su vida sentimental fue objeto de titulares —sobre todo por su relación y posterior ruptura con Albert Rivera—, la artista vuelve a mostrarse feliz y tranquila, acompañada por su hija Lucía, nacida en 2020, y por Ángel Fernández, el técnico de producción que se ha convertido en su gran apoyo y pareja, conocido en su entorno por el apodo de «El Turco».
La historia entre ambos comenzó entre bambalinas. Él, encargado de que todo funcionara a la perfección en el escenario; ella, la voz que cada noche emocionaba al público. La complicidad surgió de manera discreta hasta convertirse en una relación sólida. Desde septiembre del pasado año son inseparables, y según quienes los rodean, comparten cada instante con naturalidad y armonía. Tanto es así que la cantante no dudó en integrar a Fernández en su círculo más íntimo, presentándole a la persona más importante de su vida: su hija.
Entre los destinos elegidos para sus vacaciones, la intérprete ha vuelto a Cádiz, provincia muy ligada a su infancia en Algeciras y uno de sus lugares predilectos. Allí disfrutó de unos días junto a Ángel, la pequeña Lucía y su madre, Pepi Benítez, que quiso acompañarla en este verano tan especial, según desveló la revista Lecturas. Las imágenes publicadas mostraban a la pareja en plena complicidad: abrazos, gestos cariñosos y una naturalidad absoluta. La cantante, con una toalla a modo de albornoz, gafas de sol y aspecto relajado, evitaba la exposición directa al sol, como ella misma ha confesado en alguna ocasión, debido a una alergia que le provoca reacciones en la piel. La jornada transcurrió entre risas, baños bajo la sombrilla y momentos de ternura familiar. Hubo también espacio para el orgullo: ‘El Turco’ no ocultaba su entusiasmo al aplaudir los progresos de Lucía sobre una tabla de paddle surf.
Antes de regresar a Andalucía, la artista ya había disfrutado de unos días en Lanzarote, donde confesó sentirse como en casa. «En un lugar mágico que ya se está empezando a convertir en mi hogar… He comido, he reído, he bailado, he disfrutado de mi familia, he descansado», compartía en sus redes. Sus seguidores pudieron verla radiante en bikini, tomando el sol o degustando platos locales. Imágenes que reflejaban la serenidad de alguien que vive un momento de plenitud.
A sus 43 años, la intérprete atraviesa una etapa dorada. Su gira conmemorativa ha devuelto a los escenarios a la Malú más auténtica, esa que conecta con el público desde la emoción. Paralelamente, su vida personal ha encontrado un equilibrio tras etapas más complejas. La felicidad también se refleja en su imagen: sus últimas fotografías la muestran resplandeciente, con una sonrisa renovada. Incluso se ha especulado sobre posibles retoques estéticos, aunque ella siempre ha defendido la naturalidad. Más allá de rumores, lo cierto es que su rostro refleja la tranquilidad de quien se siente en paz consigo misma.