Domenico Mondelli, un africano al servicio de Italia
Domenico Mondelli: ascenso, caída y renacimiento de un héroe negro italiano
Domenico Mondelli, un africano adoptado que lideró arditis de choque, pilotó en guerra para su patria italiana y murió dentro del rito escocés de la masonería
Un ejemplo que pueda ayudarnos a ilustrar la existencia de racismo en Italia fue el caso de Doménico Mondelli. Nacido el 30 de junio de 1886 en Wolde Selassie (Asmara), fue un soldado y aviador italiano de origen tigrinya que se distinguió particularmente como un oficial altamente condecorado del Ejército Real durante la Primera Guerra Mundial. Perteneciente a la especialidad Bersaglieri fue adoptado en 1891 por el coronel italiano Atílio Mondelli de Parma, quien posiblemente fuese su padre. Aquello sucedió durante la retirada en Eritrea tras la derrota de Adua en el contexto de la guerra de Abisinia. En el acto de adopción estuvo presente el Dr. Napoleone Maschi, Magistrado y Consejero de la Prefectura Real de Parma, ex combatiente con el grado de Capitán en la Guerra de Eritrea.
Tropas etíopes atacan brigada del general Dabormida
El doctor Maschi fue también el primero en declarar oficialmente la presencia del joven eritreo en Parma y siempre estuvo presente en los diversos consejos familiares posteriores a la adopción por parte de la familia Mondelli. Por lo tanto, la paternidad real del niño, aunque fue tribuida tanto al coronel Mondelli como al Dr. Maschi, nunca fue averiguada.
Carrera militar
Con el correr de los años, el niño siguió la carrera de su padre en Italia desde 1900 en el colegio militar de Roma y la Real Academia Militar de Infantería y caballería de Módena. Se inició en el arma de infantería. En la especialidad de bersaglieri, el licenciado con el grado de subteniente en 1905, fue destinado al Cuerpo de Infantería, donde Sirvió inicialmente en el 5º Regimiento, pasando luego sucesivamente al 7º , 8º y 2º .
Aunque con posterioridad, apasionado por el mundo de la aviación, Domenico Mondelli logró obtener el título de piloto, licencia le otorgó la Fédération Aéronautique Internationale el 20 de febrero de 1914.
El primer piloto de combate negro era fascista.
Primera Guerra Mundial
Con la entrada en guerra del Reino de Italia , el 24 de mayo de 1915, luchó como piloto capitán en las filas del 7º Escuadrón de Reconocimiento y Combate en Nieuport IV M, realizando numerosas misiones de reconocimiento, incluso a baja altura, lo que le valió la concesión de una Medalla de Bronce al Valor Militar.
Estuvo al mando del 7º Escuadrón de Bombardeo (Caproni) desde su establecimiento el 18 de febrero de 1916 como parte del Cuerpo Aeronáutico Militar. A partir del 1 de abril siguiente formó el Grupo IV a disposición del Mando Supremo que utilizó aviones Caproni Ca.33 para bombardear la Eslovenia austríaca y Venezia Giulia.
En abril de 1917 tomó el mando de la 1ª Squadriglia Caproni. Del 14 al 25 de julio de 1917 estuvo al mando del XI Grupo, integrado por la 2ª, 3ª, 4ª, 6ª y 15ª Squadriglia Caproni, para pasar luego al mando del 67º batallón del 18º Regimiento Bersaglieri , permaneciendo allí hasta el 30 de septiembre de 1917. El 10 de octubre, con el rango de mayor , asumió el mando del departamento de asalto XXXIII «Crimson Flames» de la recién establecida especialidad arditi .
Miembros de los Arditi armados con dagas, 1918
El 1 de mayo de 1918, con el grado de teniente coronel, asumió el mando del 1.er Batallón del 242º Regimiento de Infantería de la Brigada de Teramo con la que tomó parte en la batalla del Solsticio siendo herido, y siendo sustituido al frente del batallón por el parigrado Umberto Albano. Tras el final de la guerra, condecorado con un total de dos medallas de plata y dos de bronce al valor militar, y condecorado con el título de Caballero de la Orden de la Corona de Italia, reemplazó al teniente coronel Giovanni Messe al mando de los arditi del IX Departamento de Asalto, que estaba empleado en Albania donde obtuvo su tercera Medalla de Bronce al frente del IX Batallón de Asalto.
Condecoraciones
Vemos que participó en la Primera Guerra Mundial. Tanto como piloto en la Fuerza Aérea, como aviador en los departamentos de reconocimiento y bombardeo del Cuerpo Aeronáutico Militar donde ganó varias medallas de bronce al valor militar: «En numerosas acciones de reconocimiento y ofensivas, algunas en terreno montañoso, y otras realizadas en condiciones atmosféricas desfavorables, dio muestras de serenidad y coraje. Independientemente del peligro, voló incluso a baja altura, aunque se señaló el fuego de artillería enemigo. Durante un reconocimiento, habiéndose agachado, fue alcanzado por metralla de artillería, y solo gracias a su calma y frialdad poco común pudo aterrizar en nuestro territorio. Alto Isonzo, 23 de mayo-15 de agosto de 1915».
Más tarde pasaría a tropas terrestres de primera línea, donde se destacó al frente del XXXIII regimiento de asalto «Crimson Flames» y luego del 1.er batallón del 242º regimiento de infantería «Teramo».
«Comandante de batallón, ya muy probado apenas dos días antes, inculcó en sus bersaglieri tal espíritu militar que lo condujo brillantemente al ataque tras el cual ocupó después de cuarenta y ocho horas de feroz lucha. Con su presencia mantuvo a sus hombres en el lugar a pesar del intenso bombardeo, de los inauditos sufrimientos de la sed, y fue para todo un soberbio ejemplo de valor, constancia, magnífica serenidad. Carso (q. 244), así dice la orden 22-23 de agosto de 1917» cuando le conceden una Medalla de plata al valor militar.
«Asumió, durante la lucha, el mando de un regimiento fue el primero en lanzarse a la reconquista de una posición importante, capturando ametralladoras y tomando numerosos prisioneros. En acciones posteriores estando con su batallón fue respaldado, habiendo percibido que el intenso fuego de la artillería y ametralladoras enemigas ralentizaba el ímpetu de nuestro ataque, siguiendo el impulso de su alma fuerte y audaz, corrió apresuradamente a la línea del frente para cerciorarse de la situación, siendo gravemente herido por la astilla de una granada. Sin embargo, no abandonó su puesto de batalla hasta que estuvo seguro del control firme de nuestra línea. Sasso-Col del Rosso, 16-26 de junio de 1918. » Ahora la condecoración es de bronce al Valor Militar.
Otra Medalla de bronce al valor militar
«Al frente de su propio batallón, participó en la reconquista de posiciones importantes, capturando ametralladoras y tomando numerosos prisioneros. En una circunstancia posterior, estando respaldado con su batallón, habiendo sentido que el intenso fuego de la artillería y ametralladoras enemigas ralentizaba el ímpetu del ataque italiano, siguiendo el impulso de su fuerte espíritu corrió apresuradamente a la línea del frente para constatar la situación, siendo gravemente herido en el rostro por la metralla de una granada. Sasso-Col del Rosso, 16-26 de junio de 1918».
Y otra condecoraciónal valor
«Comandante de un batallón de asalto, se apresuró con su propio departamento en defensa de una posición fuertemente atacada por el enemigo que había logrado ocupar una parte de ella. Al darse cuenta de la situación exacta, con la excelente disposición de sus hombres, pudo detener al adversario y cruzando la línea varias veces, con el ejemplo y la palabra, animó a los empleados a luchar. Presenció personalmente la salida de la línea de dos de sus unidades para el contraataque. Se movió al ataque con la primera ola. A lo largo de la lucha, confirmó válidamente su valor indiscutible como soldado. Monte Messovun (Albania), 23 de julio de 1920».
Camisa negra
En 1925 continuó la vida militar en la Milicia de Voluntarios de Seguridad Nacional, uniformados con la camisa negra del Partido Nacional Fascista italiano. La aprobación de la ley. 2029. Del 26 de noviembre de 1925. Sobre la regularización de las asociaciones y marcaba la incompatibilidad. Era del empleo público. Con ser miembro de la masonería, no se puede servir a dos señores, la pertenencia de Doménico Mondelli a esta organización le obligó a abandonar el Ejército en 1925. Por impedírsele el ascenso a coronel. Entrando entonces en la reserva. No obstante, como dijimos, pudo seguir su carrera militar. En la milicia voluntaria seguridad nacional: los camisas negras. Alcanzando el rango de cónsul general, equivalente a general de Brigada en la formación militar fascista. Fue el primer general negro italiano.
Domenico-Mondelli- con sus camisas negras
Después de la Segunda Guerra Mundial. Se le reconoció su grado militar. Con el retiro y en 1956. Obtuvo el grado 33, soberano gran inspector general del antiguo y aceptado rito escocés, al que nunca renunció.
Un arditi masón con camisa negra
Con la aprobación de la Ley 2029 de 26/11/1925 sobre Regularización de Asociaciones, que hacía incompatible el empleo público con la pertenencia a la masonería, fue objeto de discriminación y abandonó el Ejército Real durante 1925 por haberse bloqueado su ascenso a coronel, entrando en el papel de la reserva y continuando su carrera militar en la Milicia Voluntaria de Seguridad Nacional (camisas negras), alcanzando el grado de Cónsul General (equivalente a General de Brigada)
Ese mismo año, debido a las leyes restrictivas queridas por el Partido Nacional Fascista, abandonó la masonería, retirándose también de la carrera militar. En 1944, tras la caída del fascismo, se reanuda la actividad masónica en Roma en la logia Espartaco del Gran Oriente de Italia y en 1956 se le otorga el grado 33 (soberano gran inspector general) del Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Desde la Segunda Guerra Mundial vivió en Roma en via Milazzo en el distrito de Castro Pretorio hasta su muerte y también hizo una aparición en un documental sobre los africanos en Italia
Su carrera militar se reanudó, aunque en el papel de la reserva con la proclamación de la República Italiana, ascendiendo en el Cuadro de Honor al grado de general de brigada (1959), general de división (1963) y finalmente cuerpo de ejército (1968). Se le otorgó el título de Gran Oficial de la Orden del Mérito de la República Italiana el 10 de junio de 1970 con una decisión «motu proprio» del Presidente de la República Giuseppe Saragat. Murió en Roma, en el hospital militar Celio el 13 de diciembre de 1974.
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