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03 de mayo de 2024

El presidente turco Erdogan recibe a los negociadores de Rusia y Ucrania

El presidente turco Erdogan recibe a los negociadores de Rusia y UcraniaAFP

Día 34 de guerra en Ucrania

Rusia rebaja sus exigencias de «desnazificación» y permitiría a Ucrania entrar en la UE

Volodimir Zelenski intentaría, según el Financial Times, evitar el alineamiento militar del bloque, para llegar a un acuerdo con Vladimir Putin

Rusia podría rebajar sus demandas para alcanzar un acuerdo con Ucrania. Según el Financial Times, Moscú estaría dispuesto, en la mesa de negociación de hoy en Estambul, a renunciar a su exigencia de «desnazificar» Ucrania y permitiría que el país formase parte de la Unión Europea. Esto, siempre y cuando se mantuviera fuera del alineamiento militar del bloque. Dicho de otro modo, Ucrania siguiera sin tener un escudo protector de la comunidad internacional.
En un clima de mutua desconfianza y con el episodio de principios de marzo sin resolver, de la intoxicación -o envenenamiento, según se mire- de parte de una delegación ucraniana y Roman Abramovich, se retomaron las conversaciones de paz en Estambul. Atento a este escenario y sin un alto el fuego en la guerra por la negativa de Vladimir Putin, el presidente de Turquía Recep Tayyip Erdogan ejerció sus buenos oficios para crear un clima de cordialidad que permita a las partes alcanzar algún acuerdo.
Erdogan, anfitrión de este encuentro, calificó a Rusia y a Ucrania de «amigos valiosos». A ambos les reconoció «intereses legítimos», pero les instó a hacer los mayores esfuerzos para alcanzar «resultados concretos». El presidente de Turquía se mostro esperanzado de que esta ronda de conversaciones despeje el camino para que sean Vladimir Putin y Volodimir Zelenski los que puedan sellar un acuerdo definitivo que se traduzca en una paz duradera.
Para lograrlo habría que dar por buenas estas conversaciones y ahuyentar el fantasma de que para Moscú no son más que una farsa para ganar tiempo, aniquilar a quien considera su enemigo y anexionarse Ucrania. El escenario es complejo, confuso y abierto a todo tipo de especulaciones.
Rusia pasa de anunciar, como hizo el viernes, que da por concluida la «primera fase» de la «operación especial», eufemismo para referirse la invasión a Ucrania, y que se centrará en el Donbás, a intensificar los bombardeos. Un día anuncia que permitirá un corredor humanitario y al minuto lo bombardea o lo desvía a su territorio con deportaciones forzosas. Las denuncias de crímenes de guerra y de lesa humanidad se suceden en organismos internaciones y no sólo en Kiev. En este contexto, Erdogan no tienen fácil que sus «amigos» se den la mano.
En cuanto a los puntos a tratar, el pliego de discusión filtrado encuentra aspectos de resignación en Ucrania como el que apunta a mantenerse neutral y renunciar a entrar en la OTAN o a hacer copio de arsenal nuclear. Zelenski en una entrevista colectiva a medios díscolos rusos admitió que esto se «estaba estudiando a fondo». Y Rusia, parece haber recogido el guante.
La experiencia vivida en el pasado, con el tratado de Budapest por el que Ucrania entregó su abundante depósito de armas nucleares, le ha enseñado al presidente de Ucrania que necesita exigir «garantías» para no volver a encontrarse el día de mañana en una situación de debilidad como la actual. Dicho esto, Zelenski que ha logrado despertar las conciencas aletargadas del mundo y la simpatía de medio planeta, advirtió que esos pactos deberían pasar por un «referéndum».
Zelenski llegó incluso a proponer fecha de aquí a unos meses, si se alcanza consenso, pese a que su país está arrasado por las bombas. El presidente exigió, como gesto de buena voluntad y argumento para poder creer en Putin que retirase sus tropas antes. El ex humorista ha propuesto al ex agente del KGB, en varias ocasiones, sentarse juntos en una mesa para resolver de forma pacífica este enfrentamiento que está costando miles de vidas humanas. De otro modo, ni él ni la comunidad internacional podría confiar en su palabra.
La palabra es lo que está sobre la mesa en la reunión de hoy. También, por vez primera según el Financial Times, Moscú renunciaría a exigir la «desnazificación» del territorio que preside un judío, por parte de madre y de padre. Otra asunto es la imposición de obligar a enseñar y hablar el ruso en los colegios.
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