El gobernador demócrata de California, Gavin Newsom
Los demócratas aprueban en California un nuevo mapa electoral para contrarrestar la ventaja republicana en Texas
La batalla por la redistribución de distritos electorales en Estados Unidos de cara a las elecciones de medio mandato del próximo año ha entrado en una nueva fase, con California en el centro de la contienda política. La Legislatura estatal, dominada por los demócratas, ha aprobado un nuevo mapa congresional que podría otorgar hasta cinco escaños adicionales al partido en la Cámara de Representantes a partir de 2026. La medida busca neutralizar la ofensiva republicana en Texas, donde la mayoría conservadora ha impulsado un rediseño electoral favorable a los republicanos.
El gobernador Gavin Newsom firmó de inmediato el paquete de leyes que autoriza la modificación de los distritos, pero la reforma aún no es definitiva. Deberá ser ratificada en un referendo especial convocado para el próximo 4 de noviembre. «Respondemos a los que dispararon el primer tiro. No estaríamos aquí si Texas no hubiera hecho lo que acaba de hacer», declaró Newsom tras la votación.
La decisión en California llega después de que la Cámara de Representantes de Texas aprobara un nuevo mapa electoral que, según sus impulsores, garantiza al menos cinco escaños adicionales para los republicanos en distritos de mayoría latina y afroamericana. El plan cuenta con el apoyo del gobernador Greg Abbott y refuerza la estrategia nacional de Trump para asegurar la mayoría republicana en la Cámara Baja de cara a las elecciones de medio término.
Los demócratas ven en California, un estado mayoritariamente progresista y con el mayor número de distritos del país (52), la mejor oportunidad para contrarrestar la maniobra republicana. «El pueblo de California tendrá la oportunidad de determinar su destino de manera transparente», subrayó Newsom.
Aunque la aprobación en la Legislatura fue contundente —57 votos a favor frente a 20 en contra en la Asamblea y respaldo mayoritario en el Senado—, el plan ha generado críticas. Varios republicanos denunciaron un proceso «viciado» y acudieron al Tribunal Supremo de California, que finalmente rechazó frenar la reforma. También algunos demócratas expresaron reservas, y dos de ellos se abstuvieron en la votación.
Trump junto a Gravin Newsom en una imagen de archivo
Si el nuevo mapa es ratificado, afectará a distritos clave como el Primero y el Tercero, actualmente en manos republicanas, y podría reforzar a los demócratas en circunscripciones donde las últimas elecciones fueron muy ajustadas, como el 13.º distrito, decidido por apenas 200 votos en 2022.
Los republicanos controlan hoy 219 escaños en la Cámara de Representantes frente a los 212 de los demócratas. Un vuelco en California podría alterar ese delicado equilibrio. No obstante, varios estados republicanos —entre ellos Florida, Ohio e Indiana— ya preparan sus propios rediseños electorales, lo que podría dar a los conservadores hasta ocho nuevos escaños.