Cartas al director
Aquella Europa cristiana
Que Europa fue construida por el cristianismo nadie que se haya interesado lo más mínimo por el tema lo pone en duda. Que Europa se desmorona porque se ha alejado del cristianismo tampoco lo duda nadie que tenga un mínimo de conocimiento. Hay como un enconado empeño en alejar todo símbolo religioso de Europa y no ya referente a símbolos físicos identificativos: cruces, imágenes, liturgia… sino que alcanza también al pensamiento cristiano.
San Juan Pablo II describía este fenómeno de la unidad de Europa con su acertado punto de vista: «… la luz del Evangelio ha iluminado la historia de Europa dando así origen a una comunión de destinos de pueblos diversos. La acogida de la palabra viva del Evangelio significó a menudo para pueblos enteros adherirse a una comunidad de cultura y de destino, como la que tomó después el nombre de Europa».
El cristianismo latente en el corazón de la Europa de los primeros siglos fue acogiendo con el paso de los años a otros pueblos circundantes y trasmitiéndole su espíritu cívico, caballeresco y religioso a lo largo de los siglos conformándose una unidad que, si no se logró en lo territorial y político, se logró en lo cultural y humanístico.