Vamos, María - Tráiler oficial
688 religiosas y 17 países: el documental sobre la mujer que desafió la persecución y fundó una congregación
¡Vamos, María! reconstruye la vida de la mexicana María Inés Teresa Arias Espinoza, fundadora de las Misioneras Clarisas del Santísimo Sacramento, cuya obra llegó a los cinco continentes
Pocas frases resumen tanto. «¡Vamos, María!» fue la expresión que impulsó a una joven a fundar una congregación misionera que, desde un pequeño pueblo de Nayarit, México, llegó a los cinco continentes.
El próximo 15 de agosto, el documental ¡Vamos, María! se estrenará en YouTube, a través del canal oficial de su director, para contar con rigor y cercanía la vida de la beata María Inés Teresa Arias Espinoza.
En medio de persecuciones religiosas, enfermedades y decisiones contracorriente, decidió entregar su vida a Dios y fundar una congregación presente en 17 países: las Misioneras Clarisas del Santísimo Sacramento.
Teresita del Niño Jesús cambia el rumbo
Narrado por el sacerdote mexicano Heriberto García Arias, el documental arranca con una búsqueda personal: descubrir por qué Andrea, prima de María Inés, decidió entregarse a la misión junto a estas religiosas en Japón.
Desde ahí, la historia lleva a Roma, a la Casa General de la congregación, donde varias religiosas repasan en primera persona el legado y el carácter de la mujer que, en plena persecución religiosa, apostó por una vida de entrega total.
El documental se apoya en entrevistas, archivos históricos y testimonios para reconstruir con claridad la vida y legado de una fundadora cuya influencia sigue presente, aunque su nombre aún sea poco conocido.
La historia comienza en Ixtlán del Río, con una niña alegre y decidida que, lejos de cualquier aspiración extraordinaria, va descubriendo una vocación que la separará del camino esperado: rechaza varias propuestas de matrimonio y, tras una enfermedad, encuentra su rumbo leyendo a santa Teresita del Niño Jesús.
En plena persecución religiosa, María Inés opta por el camino más exigente: la vida consagrada. Lo hace con decisión, pero no sin luchas internas. El documental muestra con claridad esos primeros años marcados por el desgaste físico, las dudas vocacionales y la tentación constante de abandonar.
De 5 a 688 religiosas
La fundación de la congregación en 1945 marca un punto de inflexión. Cinco religiosas, una casa en Cuernavaca y una certeza: llevar el amor de Dios a los más necesitados. Desde ahí, la expansión no se detuvo. Hoy, 688 religiosas de su instituto sirven en hospitales, escuelas y comunidades vulnerables en lugares tan diversos como Nigeria, Corea del Sur, Italia o Indonesia.
Pero el documental no se queda en los números. Aborda también las tensiones internas, las incomprensiones y la soledad que vivió la fundadora. Momentos que prueban su fe y su capacidad de perdón. «Vamos, María», frase que repetía una y otra vez, se convierte en un hilo conductor: es una llamada a confiar cuando todo parece perdido, eco de su amor profundo a la Virgen de Guadalupe y de su convicción de que solo desde Dios se puede sostener una obra así.
Además del retrato humano y espiritual, el filme revela detalles de su proceso de beatificación, incluyendo el milagro que se le atribuye: la curación inexplicable de un niño tras la oración confiada de su familia. Un hecho clave para su reconocimiento oficial por la Iglesia en 2012.
Más que una biografía, ¡Vamos, María! es una invitación a mirar de frente una pregunta de fondo: ¿qué significa confiar en Dios hoy? A través del testimonio de María Inés, el documental plantea cómo esa confianza puede traducirse en una vida concreta, sostenida por la fe y abierta al servicio.