Siete consejos para evitar o amortiguar la resaca el día de Año Nuevo
Nochevieja es, por excelencia, una de las noches en las que más se come y más se bebe
- Comer alimentos ricos en glucosa, fructosa o hidratos de carbono. Cinfasalud recomienda comer fruta fresca, tostadas o galletas integrales, algo que favorecerá que se eleve el nivel de azúcar en sangre. Las legumbres y el muesli también serán grandes aliados, ya que aportan carbohidratos, fibra y minerales.
- Beber mucha agua. Una de las principales causas de la resaca es debido a que el alcohol deshidrata. Por ello, si mientras bebes cubatas vas intercalando vasos de agua, la deshidratación será menor.
- Ingerir las bebidas alcohólicas de forma lenta y con el estómago lleno.
Cómo mitigarla
- Beber agua desde el momento que nos levantemos, puesto que necesitamos rehidratarnos. Las bebidas isotónicas y los consomés pueden contribuir también a reponer sales minerales.
- Analgésico, no ibuprofeno. «Noches de desenfreno, mañanas de ibuprofeno», según reza el dicho. Pues bien, esto es falso: los antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno o el acetilsalicílico pueden irritar el estómago y empeorar los síntomas de la resaca. El paracetamol, por contra, puede dañar el hígado si se combina con alcohol, pero si se toma con precaución puede aliviar los síntomas.
- Evitar las grasas animales. Cuando tenemos resaca, es habitual levantarse con ganas de comer una hamburguesa. Sin embargo, se recomiendan las carnes poco magras, los pescados azules y las grasas de origen vegetal (aceite de oliva o frutos secos).
- Descansar lo suficiente. Incluso aunque nos sintamos bien al despertar, es recomendable guardar reposo, ya que puede hacer efecto rebote y que a medida que avance el día nos vayamos encontrando peor.