Cinco razones por las que tu peso puede variar de un día a otro en hasta 2 kilos

La báscula es un indicador indiscutible del aumento o disminución del peso corporal asociado, entre otros factores, a una mala alimentación o a la ingesta de medicamentos. Blanca García-Orea, graduada en Nutrición y Dietética profundiza en el tema y ofrece cinco razones por las que se puede aumentar de peso y que nada tienen que ver con la cantidad de grasa.

En su cuenta de Tiktok, la experta, conocida en redes como blancanutri, explica, en primer lugar, que una alimentación rica en azúcares y ultraprocesados hace que se retenga más líquidos lo que puede tener una repercusión en el aumento de peso.

La segunda causa es el estreñimiento: «No vaciar nuestro intestino con frecuencia nos va a hacer que tengamos más hinchazón, más retención de líquidos y, por lo tanto, mayor peso».

Aunque pueda parecer contradictorio, empezar a entrenar también es causa de ganancia de peso: «Si eres una persona sedentaria, puedes notar que los primeros días de entrenamiento retengas más líquidos o aumentes de peso, fruto de los cambios metabólicos de adaptación del músculo» y añade: «Conforme el cuerpo se va adaptando al entrenamiento, irás notando mejoría».

La cuarta causa es la práctica de ejercicio de alta intensidad: «Con este tipo de ejercicios podemos notar una variación temporal en nuestro peso de hasta dos kilos debido a la retención de agua que se produce por la inflamación muscular».

Respecto a las mujeres se puede hablar de una quinta causa: el ciclo menstrual: «Las mujeres, cuando tenemos la regla, podemos experimentar una variación de nuestro peso de entre 1,5 y 2 kilos debido a la retención de líquidos por los cambios hormonales. Una vez termina la regla normalmente se vuelve a bajar».

La hora del día influye en el peso

Ingerir menos calorías de las que se gastan es la clave para bajar de peso pero también es importante tener en cuanta a qué hora se ingieren esas calorías. Según un estudio, comer más de las calorías diarias a primera hora del día puede contrarrestar el aumento de peso, mejorar las fluctuaciones de azúcar en la sangre y reducir el tiempo que el azúcar en la sangre está por encima de los niveles normales. Joanne H. Bruno, autora principal del estudio, explica: «Este tipo de alimentación, a través de su efecto sobre el azúcar en la sangre, puede evitar que las personas con prediabetes u obesidad progresen a diabetes tipo 2», explica.

Otra investigación del Instituto de Salud Global de Barcelona concluyó que cenar tarde es uno de los principales motivos que nos hacen ganar kilos. Los investigadores afirman que cenar, al menos, dos horas antes de irse a dormir no solo es la clave para reducir hasta un 20 % el riesgo de sufrir cáncer de próstata o de mama sino que influye en el metabolismo. Dejar pasar dos horas ayudará a no engordar y a disfrutar de una mejor calidad del sueño.