
Sala de prensa durante el programa Cara a Cara. El Debate
Cara a cara
La palabra que no pronunciaron los candidatos y de la que depende el futuro de España
La gran revolución que vive el mundo no la tuvieron en cuenta ni Sánchez ni Feijóo
El cara a cara entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo se dejó en el tintero varios temas. Quizá, los candidatos consideraron que no era el momento de hablar de deporte, cultura o ciencia, pero también olvidaron cualquier referencia a la tecnología.
Puede ser un término muy genérico, pero, no hay duda, de que la gran revolución que vive el mundo se basa en una palabra que no se pronunció ni una sola vez en las casi dos horas de debate.
IA y blockchain
La inteligencia artificial, las cadenas de bloques y, por extensión, las criptomonedas y el metaverso son los tres pilares del futuro de cualquier sociedad. Los políticos han demostrado sus absolutas carencias en estos campos y las únicas medidas que se han tomado han sido las de prohibir todo por miedo.
España, como en otros asuntos, vive bajo el paraguas de la Unión Europea y lo único que hace es trasladar leyes aprobadas en Bruselas a la legislación española y asumir sus propuestas.Las carencias tecnológicas de España no tuvieron espacio en el cara a cara, pero sí en los programas electorales. En el caso del PP, dedican dos páginas a lo que llaman «Administración Inteligente» y aseguran que «a la aparición de nuevas necesidades, que requieren la actuación del Estado, se une la generalización de tecnologías que ofrecen nuevos medios como el big data, la Inteligencia Artificial o el blockchain. La Administración necesita transformarse para dar respuesta a las necesidades e integrar la tecnología a su actuación ordinaria».
El PSOE anuncia en su programa que pondrá en marcha «la Agencia Española de Supervisión de Inteligencia Artificial para analizar y verificar el desarrollo y la implementación segura y confiable de tecnologías basadas en inteligencia artificial, así como de un marco ético y normativo que permita desarrollar una IA fiable y alineada con los principios éticos y sociales y potenciar su uso mediante la adopción de medidas para reforzar la confianza social en las tecnologías digitales».
Justicia
Al menos, en sus cartas de presentación sí que prestan atención a una realidad necesaria para España en algo tan básico como, por ejemplo, la administración de Justicia donde el uso del papel es ingente y la digitalización es algo a lo que no saben cómo enfrentarse.
La burocracia de la España digital es casi tan complicada como la presencial, pero el futuro ya es presente y las cadenas de bloques son imprescindibles para la seguridad de los datos. Solo hace falta entenderla e implementarla y para ello las medidas educativas son esenciales para que se fomenten los estudios tecnológicos y se evite la fuga de cerebros.
Las criptomonedas son la criptonita de los políticos. Ninguno quiere mirar a la cara este modelo económico que se sigue extendiendo por el mundo. Algunos países han aceptado el bitcoin como moneda de curso legal y cada vez más españoles invierten en este tipo de activo. Los legisladores prohíben y exigen el pago de impuestos. Es su brazada de ahogado porque saben que este sistema económico liderará el mercado en los próximos años y no saben cómo aliarse con él.
Modelo tecnológico
La inteligencia digital no debe ser prohibida, como ha hecho Italia, pero tampoco se puede permitir la laxitud de Estados Unidos con los datos personales y, en este punto, España y Europa tienen leyes eficaces.
Una España sin un modelo tecnológico claro es una España débil. En los últimos años, tanto PP como PSOE han puesto en marcha organismos como INCIBE para la seguridad digital, pero la velocidad de las nuevas tecnologías no permite dejarse llevar porque entonces ya será tarde.