El objetivo es generar reseñas falsas en tiendas online
Así es el 'bruising', la estafa de los paquetes sorpresa que llegan sin pedido
Tras esos envíos aparentemente inocentes, se esconde una estrategia de manipulación que aprovecha la confianza de los consumidores
En los últimos años se ha hecho cada vez más común que algunas personas reciban en su casa paquetes que nunca pidieron. En apariencia, puede parecer un simple error de mensajería, pero en realidad podría tratarse de una práctica fraudulenta conocida como brushing.
En concreto, es una técnica se ha extendido a nivel mundial, especialmente en el comercio electrónico, y aunque no supone un riesgo económico directo para quien recibe el paquete, sí implica problemas relacionados con el uso indebido de datos personales y con la reputación de las plataformas de venta.
El brushing consiste en que un vendedor envía productos a direcciones reales sin que los destinatarios los hayan comprado. El objetivo es generar reseñas falsas en tiendas online. Al tener constancia de un envío con seguimiento, el sistema de la plataforma valida la compra como legítima.
De esta forma, el vendedor puede publicar opiniones positivas bajo perfiles ficticios, aumentando artificialmente su visibilidad y credibilidad frente a la competencia. En muchos casos, los artículos enviados son de poco valor, como accesorios, gadgets de bajo coste o pequeños objetos de uso doméstico.
No siempre lo gratuito es inofensivo
El verdadero problema de esta práctica está en la obtención y utilización de datos personales. Si recibes un paquete no solicitado, significa que alguien ha accedido a tu nombre, dirección y, en ocasiones, incluso a tu número de teléfono. Esto genera preocupación, ya que esos datos pueden haberse filtrado de bases de datos poco seguras o compartido sin consentimiento.
¿Qué hacer si te llega un paquete que no pediste? Lo primero es no pagar nada al repartidor y, si lo deseas, conservar el artículo, ya que legalmente no estás obligado a devolverlo. También es recomendable informar a la plataforma de comercio electrónico implicada y revisar posibles fugas de datos en tus cuentas online.
En caso de recibir repetidamente este tipo de paquetes, conviene alertar a las autoridades de consumo o a la policía para dejar constancia.
El brushing es un recordatorio de que no siempre lo gratuito es inofensivo. Tras esos envíos aparentemente inocentes, se esconde una estrategia de manipulación que aprovecha la confianza de los consumidores y pone en riesgo su seguridad digital.